La Asamblea Nacional francesa aprobó ayer la ley que autoriza el matrimonio entre personas del mismo sexo y que permite la adopción a las parejas de homosexuales. La ley deberá ser ahora ratificada por el Senado, donde está previsto que el debate comience el 2 de abril.

La ley, una de las promesas del presidente francés, François Hollande, fue refrendada en primera lectura por 329 votos a favor, 229 en contra y diez abstenciones, superando los 280 votos necesarios para salir adelante.

A favor del texto votaron los diputados del PS y también dos miembros de la derechista UMP, mientras que las abstenciones han sido principalmente de miembros de este partido así como algún parlamentario próximo a la izquierda, según los medios galos.

El proyecto defendido por la Ministra de Justicia, Christiane Taubira, ha provocado una profunda división de los franceses, con marchas multitudinarias de partidarios y detractores, que no han influido en la voluntad del Gobierno, el cual desestimó la celebración de un referéndum, como solicitaba la UMP.

El PS también cuenta con mayoría en el Senado, por lo que el texto debería de salir adelante sin problemas, si bien podrían introducirse algunos cambios.

La diputada vasca del PS por Pirineos Atlánticos Sylviane Alaux calificó de «avance» la adopción de esta ley y criticó la «lógica obstruccionista parlamentaria» de la oposición.