El Gobierno navarro acordó ayer una regularización de su plantilla orgánica, que queda en 24.138 trabajadores tras suprimir, por primera vez, 336 plazas, 227 de ellas por la amortización de jubilaciones, y 109 por la externalización de las cocinas hospitalarias.

Según explicó el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Javier Morrás, el acuerdo «no responde a despidos de funcionarios públicos» ni tampoco al anuncio de una reducción de plantilla «a futuro». No obstante, anunció que «más allá de las sustituciones que sean ineludibles» no habrá contratación pública «con carácter general» y se articularán «todos los medios posibles para no incrementar la plantilla de la Comunidad Foral», al tiempo que se ha dado la instrucción «clara y rotunda» de reducir «a ser posible a cero» las horas extraordinarias.

El consejero reconoció que el «mayor impacto», todavía no resuelto, está en el área de Salud «con la dificultad de abrir quirófanos y reducir listas de espera por las tardes».

La reducción acordada es consecuencia de la aplicación del acuerdo tomado por el Gobierno el 15 de febrero de 2012, por el que se dictaban instrucciones relativas a la reducción del gasto en materia de personal. Según indicó el portavoz Sánchez de Muniáin, «hay que regularizar, porque lo que no procede son plantillas orgánicas que vienen recogiendo año tras año puestos de trabajo que en ocasiones, por inercias administrativas, son absolutamente obsoletos».

Insistió en que no se trata de un nuevo recorte ni reducción de empleo público. Morrás afirmó por ello que esta regularización no debiera tener «ningún tipo de contestación» por parte de los empleados públicos ni provocar «ningún tipo de zozobra o miedo».

El gasto correspondiente a las plazas suprimidas asciende a 11 millones de euros anuales, de los que 8,5 millones corresponden a la amortización realizada en la Administración Núcleo y 2,5 millones de euros, a la reducción de plantilla del Servicio Navarro de Salud.

Tras la regularización, el promedio de empleados públicos del Gobierno de Nafarroa se aproxima a niveles de empleo público de 2008, con 24.138 trabajadores.