Esta edición muestra el tono más apagado de las últimas convocatorias, aunque existen representantes de 26 países de Portugal, Turquía, Gran Bretaña, Colombia, Argelia, México y Marruecos, entre otros mercados estratégicos. Ferroforma-Bricoforma 2013, la Feria Internacional de la Ferretería y el Bricolaje, líder estatal y entre las principales en el ranking europeo, permanecerá abierta hasta el viernes 15 de marzo.

Arantza Tapia, consejera de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno de Gasteiz, acompañada por los responsables del Bilbao Exhibition Centre (BEC) visitó el certamen. En esta edición son 362 empresas e incluirá espacios para el análisis y el conocimiento práctico. Justo en el momento en que Tapia estuvo inaugurando Ferroforma, el lehendakari Urkullu presentaba unos presupuestos restrictivos para 2013. «Están pensados -dijo sobre las cuentas, que no pudo eludir- en las personas y en la situación de urgencia que atravesamos. Se trata de atajar la crisis y conseguir la reactivación industrial».

Acompañada por el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, y el alcalde de Barakaldo, Tontxu Rodríguez, admitió que «nuestro presente es fruto del esfuerzo del tejido industrial y Ferroforma es prueba de ello». Esas palabras las siguieron con atención el presidente de la patronal vasca, Miguel Angel Lujua, y la secretaria general, Nuria López de Gereñu, que aceptaron con gestos las palabras de la consejera de «impulsar la actividad industrial, que es nuestro principal punto de desarrollo».

Modelo de gestión

Llamó a los empresarios vascos a avanzar en modelos de gestión de futuro «porque tenemos una oportunidad de oro para avanzar en ese terreno, como antes lo hicimos en la innovación de productos y servicios».

También recalcó la necesidad de «preparar el entorno para ser más competitivos» y se mostró dispuesta a «acompañar al sector empresarial para crear empleo y garantizar el bienestar social». Fueron palabras, como admitió, de «optimismo» que, sin embargo, no se traslucieron ni entre los expositores ni en el cortejo que siguió a la consejera en su recorrido entre dieciséis expositores elegidos.

Entre los reunidos en solo dos pabellones, se puede encontrar de todo: desde una llave de mano de la alavesa Ega Máster o Bellota a sistemas de cerradura de Arregui, pasando por herramientas de corte, tuercas y sistemas de tornillería avanzada, pegatinas, escaleras y cualquier producto para el bricolaje que a cualquiera se le ocurra. En el BEC de Barakaldo está lo último de este sector de la ferretería y del bricolaje, aunque en este momento el problema de la crisis económica ha reducido la expectación y la presión sobre las propias novedades de la feria.

Son muchos los ejemplos, pero en esta ocasión, las diferentes marcas están a la defensiva. «Tenemos bastante con resistir este embate de la crisis», dijo un representante de Súper Ego Tools.

Las principales áreas expositivas serán las de suministro industrial, para la construcción y protección laboral (31%); herramienta manual, maquinaria eléctrica y para madera (25%); cerrajería y herrajes (11%); ferretería y hogar (10%); clima, decoración, electricidad y jardín (9%); fijaciones (6%), además de servicios y equipamiento comercial.

Oportunidades de negocio

En este encuentro se desarrollarán distintas jornadas en las que expertos internacionales presentarán oportunidades de negocio y prospecciones de mercado en Argelia, Angola, Marruecos, Brasil, Rumania, Ucrania, Rusia, México y Panamá. Sin embargo, en esta ocasión la presencia alemana, francesa y del sureste asiático es prácticamente nula, lo que es un indicativo de la crítica situación que se atraviesa. En esta primera jornada, que no es representativa de cómo se desarrollará la feria internacional, los diferentes expositores mostraron su «temor», aunque varios de ellos reconocieron que «tenemos que estar aquí, porque es un escaparate que nos sirve de promoción y para cerrar negocios, como no puede ser de otra forma», explicaron de la empresa Alejandro Altuna.

Prácticamente, coincidieron otros expositores, «que esperan que pasemos cuanto antes este bache». Igor Requejo, de Rosmil, explicó que es «un punto de encuentro. Sabemos que nos van a venir bastantes clientes, creemos que será interesante». Se dedica a la tornillería especial. «Somos una referencia», dijo. A la vez admitió que «igual que al resto, nos ha afectado la crisis. Esperemos que la dejemos atrás cuanto antes».