La justicia argentina condenó ayer a cadena perpetua a Reynaldo Bignone, último presidente de la dictadura militar (1976-83), por los crímenes de lesa humanidad cometidos contra 23 víctimas, 7 de ellas mujeres embarazadas, en el centro clandestino de Campo de Mayo. Junto a Bignone fueron condenados también a prisión perpetua los exmilitares Omar Riveros, Luis Sadi, Eduardo Oscar Corrado y Carlos Tomás Macedra. Los apropiadores de la nieta Laura Catalina de Sanctis Ovando, Carlos del Señor Garzón y María Francisca Morillo, fueron condenados a 15 y 12 años de prisión.