Las aportaciones a las EPSV en 2012 cayeron un 20,56% «por la crisis»
La Federación de Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) presentó ayer el balance de 2012. El patrimonio superó los 20.382 millones y las cuotas alcanzaron los 923 millones, un 20,56% menos que hace un año debido «a un ejercicio difícil por los efectos de la crisis y la entrada en vigor de la minoración tributaria de los límites de reducción en el IRPF». Negocian con las haciendas forales más ventajas fiscales y dudan del Fondo de Reactivación de Lakua.
Juanjo BASTERRA | BILBO
Ina Etxebarria, presidente de la Federación de Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV), las vicepresidentas María Goikoetxea y Virgina Oregi y el secretario técnico, Patxo Aiestaran, presentaron ayer en Bilbo el balance de 2012. «Fue un año complicado», señaló el presidente y recordó que el patrimonio de estas entidades supera ya los 20.382 millones, un 30,78% del PIB, casi cuatro veces el porcentaje que controlan los fondos de pensiones en el Estado español «pero alejado de los fondos privados de Holanda y los países nórdicos, que superan el 100% del PIB».
Hay 1,17 millones de partícipes en planes, «algunos tienen más de uno», y las cuotas satisfechas el año pasado se redujeron en un 20,56% hasta los 923 millones, «por el efecto de la crisis y la entrada en vigor de la minoración tributaria de los límites de reducción». El año pasado hicieron frente a 925 millones en prestaciones de pensio- nes, un 7,57% menos.
Etxebarria pintó un futuro oscuro para el sistema de Seguridad Social con el objetivo de que los trabajadores vascos inviertan en el sistema privado de pensiones complementarias. «Se endurecen los requisitos para el acceso a una pensión, se calculará sobre toda la vida laboral y el sistema necesita masas críticas de cotizantes para que sea sostenible». Instó a «generalizar la pensión complementaria», aunque admitió que se necesitan salarios altos para «poder destinar una parte a estas aportaciones».
Fondo de reactivación
Sobre el Fondo de Reactivación Económica, que Lakua aprobó este martes con una primera provisión de 300 millones, los responsables de la Federación de EPSV mostraron bastantes dudas. Etxebarria remarcó que «será cada EPSV la que decida entrar o no». Para dar ese paso, el Ejecutivo de Urkullu debe modificar la normativa, por lo que las EPSV no podrían entrar «antes de abril». En un encuentro que celebraron la pasada semana, el Gobierno les ofreció una rentabilidad del 3,3% en el total del periodo de 3, 5 y 7 años.
Por su parte, Goikoetxea remarcó que es una rentabilidad «muy ajustada» y «a ese plazo solo entraremos 3 años, porque en todo el período es lo mismo». Además, Etxebarria apuntó que hay EPSV que «no podrán entrar, porque nosotros nos tenemos que preocupar de obtener recursos para pagar las pensiones». De hecho, dejó claro que ni Elkarkidetza ni Itzarri podrían hacerlo, porque «Madrid les ha prohibido que se inyecten las prestaciones económicas acordadas. Están atadas». Ante las dudas de Confebask sobre las inversiones de las EPSV, confirmadas ayer mismo por su secretaria general, Nuria López de Gereñu, contestaron que «nunca ninguna EPSV se ha visto implicada en una mala inversión» y recordaron que tienen invertidos en «euskobonos» más de 700 millones. «Nuestras inversiones son más a largo plazo porque debemos garantizar la seguridad de nuestras necesidades de pago», dijo Goikoetxea.
Por otra parte, la Federación de EPSV de Euskadi trabaja con algunas haciendas forales para mejorar las condiciones fiscales de las mismas en distintos aspectos, pero que no entrarán en vigor en 2013.
El director general de Itzarri, que gestiona los complementos de pensiones de los funcionarios de Lakua, José Ignacio de Pablo, se mostró partidario de adherirse al programa para la financiación de pymes y autónomos, aunque recordó que la decisión final está en manos de la junta de gobierno de la entidad.
De Pablo compareció en la comisión de Instituciones, Seguridad y Justicia del Parlamento para explicar la posición de Itzarri sobre la propuesta de utilizar los fondos de las EPSV para la financiación. Aseguró que la EPSV que dirige cuenta actualmente con 42 millones que se podrían poner a disposición de las empresas «desde mañana sin lastrar la rentabilidad para los socios». En este caso, los responsables de la Federación de EPSV mostraron muchas dudas sobre esas garantías.
Por otro lado, Elkarkidetza, la EPSV de los empleados forales y municipales, mejora sus resultados y abona 21 millones a 4.529 pensionistas en el año 2012. Pese a las dificultades del mercado y a la prohibición legal dictada por el Estado de realizar aportaciones institucionales, «mejoró sus resultados durante el año 2012. Pagó prestaciones por 21 millones a 4.529 pensionistas, obtuvo una excelente rentabilidad (8,54%), elevó su patrimonio más allá de los 800 millones e incrementó la tasa de solvencia (17,88%), muy por encima del mínimo legal establecido. GARA