En la jornada de ayer volvió a quedar patente que el Gobierno de Iñigo Urkullu lo va a tener muy difícil para sacar adelante sus cuentas. El PSE insiste en la necesidad de cambiar el apartado de ingresos y no tener así que afrontar tantos recortes. UPyD también confirmó la presentación de una enmienda a la totalidad, porque el proyecto «no sirve para salir de la crisis» al estar «plagado de recortes» y sustenta «un proyecto nacionalista». Y el PP anunció que prepara «una alternativa» a las cuentas del PNV.

En este contexto, el principal grupo de la oposición, EH Bildu, propone al Ejecutivo de Iñigo Urkullu que retire su proyecto y se ofrece a colaborar en la redacción «de unos presupuestos nuevos, con unos cimientos distintos y que hagan frente a la situación de emergencia que vivimos», según afirmó Laura Mintegi en rueda de prensa.

La portavoz independentista manifestó que «teniendo en cuenta que el proyecto tiene en contra a la mayoría de la oposición política, a los sindicatos y a los agentes sociales, sería incomprensible e irresponsable empecinarse en seguir con el proceso».

En opinión de EH Bildu, «Urkullu tiene dos opciones: convertirse en un muro de contención contra la ola social que representan los partidos, los sindicatos y los agentes sociales; o aprovechar esa fuerza que hacemos para oponerse a los recortes de Madrid».

Quitar y poner

El pasado martes el Gobierno de Lakua pidió a la oposición que deje la «demagogia» y haga propuestas sobre de dónde quitar y dónde poner en el presupuesto. Laura Mintegi respondió que lo que EH Bildu propone es «de dónde sacar ingresos, para no quitar nada».

EH Bildu pidió a Lakua «actitud valiente» para diseñar unos presupuestos «propios y no impuestos». Según Mintegi, «en lugar de ser meros contables y gestionar cantidades impuestas de antemano desde Madrid», deberían «tomar decisiones políticas».

También desde el PSE se criticó la actitud del Gobierno de Lakua, denunciando que «demagógica» es la propaganda que están realizando con el proyecto de presupuestos y los planes presentados esta semana. Su portavoz, José Antonio Pastor, insistió en que es posible consignar más ingresos, recordando que el representante del Ejecutivo de López en la última reunión del Consejo Vasco de Finanzas al que asistió ya evidenció que se podían anotar unos 800 millones más en virtud de los cambios legales introducidos en materia fiscal, la negociación del Cupo y un mayor afloramiento del fraude fiscal.