GARA > Idatzia > Kultura

CRíTICA: «Spring Breakers»

¿Qué hace tu hija en las vacaciones de Semana Santa?

p059_f01.jpg

Mikel INSAUSTI

Hay que saber ser un agitador como Harmony Korine, que no cae en la provocación fácil y la complica hasta donde haga falta. Su tema favorito para escandalizar a las mentes bienpensantes siempre ha sido el de los menores, ya desde que en su primera juventud escribiera el guión de «Kids» para Larry Clark. En todos estos años no ha dejado de ser el eterno enfant terrible, que al cumplir los 40 es capaz de estrenar un material insultantemente generacional con el que epatar a la crítica que se tiene por adulta, porque ante «Spring Breakers» no queda otra que apuntarse a la fiesta salvaje y quemar las últimas neuronas en activo.

Hay gente que se está haciendo un lío con el hecho de que «Spring Breakers» sea la primera película del independiente Korine que cuenta con un reparto estelar de Hollywood, y que gracias a eso pueda contar con una distribución que ninguna de sus otras realizaciones tuvo. En efecto es así, pero tan decadente detalle la hace todavía más profundamente subversiva. El casting no deja de ser una maldad, una perversión de la imagen mediática que se da de las famosas quinceañeras. Ha contratado a ex actrices adolescentes del canal Disney para que hagan de chicas descarriadas. El tío Walt debe estar a punto de descongelarse en su tumba criogénica.

La estética deliberadamente hortera de «Spring Breakers» es puro arte pop, surgido de los desperdicios culturales sin reciclar de la clase marginal white trash. Korine reinventa «Jersey Shore» o «Gandía Shore», para crear su particular «Miami Shore», en cuanto resultado brutal de un cruce con «Miami Vice», junto a un homenaje muy bien traído al «Scarface» de Brian De Palma. Pero la sugerente atmósfera es la de «Drive», gracias a la música de Cliff Martinez, ideal para las escenas en las que un irreconocible James Franco transformado en «gangsta» conduce su Chevy Camaro. El nuevo Mago de Oz está impagable cuando interpreta al piano la canción «Everytime» de Britney Spears, acompañado del coro de piscineras armadas, con la cara cubierta bajo pasamontañas rosas.

 

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo