Urkullu afirma que los 300 millones darán «oxígeno» a 1.800 empresas
Iñigo Urkullu presidió ayer la firma de los convenios de colaboración para la puesta en marcha de los primeros 300 millones que se destinarán al fondo de financiación para pymes y autónomos y que, según el lehendakari, ayudarán a 1.800 empresas y mantendrán 19.000 empleos.
GARA | GASTEIZ
Lehendakaritza acogió ayer la puesta en escena de la firma de los convenios de colaboración con nueve entidades financieras y dos sociedades de garantía recíproca para el programa de financiación a pymes y autónomos que el Ejecutivo aprobó la semana pasada y que tendrá un montante global de 600 millones de euros.
En su discurso, Urkullu justificó la habilitación de este programa por la necesidad de garantizar la financiación de circulante para la pequeña y mediana empresa y para los autónomos, algo que estimó «esencial» para el mantenimiento del empleo.
El lehendakari señaló que estos primeros 300 millones de euros que se ponen a disposición de las empresas van a permitir que 1.800 compañías vascas reciban «el oxígeno que necesitan» y que se mantengan 19.000 puestos de trabajo. A su vez, garantizó que «cuando se agoten estos 300 millones, vendrán otros 300 si es necesario».
El lehendakari subrayó que con este plan «es la sociedad vasca la que también está avalando a la empresa vasca». Por este motivo, pidió a «empresarios, trabajadores y a sus entidades representativas» que sean «conscientes de que es la aportación de la ciudadanía la que se ha volcado en su apoyo».
Urkullu finalizó su intervención con un mensaje «de esperanza e ilusión», aunque reconoció que 2013 «está siendo y va a ser un año duro».
Por su parte, la patronal vasca Confebask, que agradeció al Gobierno de Gasteiz que haya tenido en cuenta su propuesta para la financiación de las empresas, señaló que el plan presentado ayer es «un paso en la dirección adecuada» y volvió a invitar a las Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) y otros fondos a formar parte de la iniciativa
La organización empresarial también valoró que la financiación aportada a través del programa se haga a un coste «razonable y con unos plazos amplios».
Por su parte, la sociedad de garantía recíproca Elkargi calificó de «muy positiva» la puesta en marcha del plan ya que «permitirá a pymes y autónomos con futuro hacer frente tanto a su dificultad de acceso al crédito, como a la renegociación del mismo a costes más competitivos».
El sindicato LAB opinó ayer que el fondo de financiación firmado ayer supone «vender humo» y no es más que la continuación del programa de avales que ya puso en marcha el gabinete de Patxi López.
En un comunicado, LAB sostiene que «se está pretendiendo vender como solución, una improvisación y renuncia expresa a hacer algo verdaderamente eficaz para salir de la situación actual».
A juicio del sindicato abertzale, el plan no va a impulsar «cambios significativos en el modelo socio-productivo vasco» ya que «ni siquiera es un fondo. No es más que un programa de avales que no va a tener ninguna incidencia ni en la creación de empleo de calidad ni en la mejora del tejido productivo vasco», afirma.
En concreto, pone en cuestión que se califique de «logro» la consecución de unos intereses del euribor más un 3,5%, lo que triplica el precio del dinero fijado por el BCE, motivo por el que se pregunta si esto «facilita el crédito a las empresas o el negocio de los bancos».
Ante ello, subraya que la financiación de las empresas «requiere sobre todo, voluntad política, capacidad de decisión en Euskal Herria y un cambio profundo en la orientación de las políticas públicas». GARA
Las entidades que han suscrito el convenio son Kutxabank, Caja Laboral, Banco Santander, Caixabank, Banco de Sabadell, Banco Popular, Bankinter, Caja Rural de Navarra y Bankoa. Las sociedades de garantía recíproca colaboradoras son Elkargi y Oinarri.
