Cómoda victoria merengue para evitarse el infierno
Para la media hora, el Real Madrid ya se había adelantado por partida doble aprovechando las facilidades de la defensa turca. Ronaldo, que anotó el primer gol, se coloca como máximo anotador de la competición.
REAL MADRID 3
GALATASARAY 0
Natxo MATXIN
Muy mal lo tendría que hacer el Real Madrid para no estar en la semifinales de la Champions, tras cosechar un resultado amplio que le permitirá acudir al infierno turco con toda la tranquilidad del mundo. Es más, los de Fatih Terim, obligados a lo imposible, se lo volverán a poner muy fácil para que la escuadra merengue vuelva a jugar a lo que más le gusta: ceder la iniciativa al rival y cogerle la espalda para matarlo con su habitual eficacia goleadora.
Así acabó con el Galatasaray para la primera media hora de encuentro, cuando primero Cristiano Ronaldo superó a la endeble defensa turca para abrir el marcador y Benzema lo acabó de redondear en otra falta de consistencia de la zaga visitante. Como otras víctimas anteriores, los otomanos se vieron con un resultado muy adverso casi sin darse cuenta de lo que les había sucedido.
Además, y a diferencia de su contrincante, los aslanlar (leones) fallaron cuando tuvieron las ocasiones más claras, algo que se paga y mucho en una competición tan exigente como esta. Ni Drogba encontró puerta en el minuto 12, ni Eboué consiguió superar a Diego López cuando se encontraba en situación franca para marcar al filo del descanso.
Terim trató de armar a su equipo tras el descanso -sacó un tercer central- y ello propició que los suyos dispusiesen más de la pelota con un Madrid bastante replegado, pero aún así volvió a encajar en una jugada a balón parado en un error imperdonable de marca.
Sin quitar mérito a los anfitriones, su técnico, Jose Mourinho, no podrá quejarse en esta ocasión del arbitraje. El trencilla noruego no vio unas manos de Khedira cuando el electrónico anunciaba el 1-0 ni tampoco señaló penalti de Ramos a Yilmaz con el 2-0. Muy al contrario, amonestó al turco por simular pena máxima, cuando las imágenes de televisión dejaron claro que el defensa andaluz le dio un pisotón.
Messi, no tan grave
Lo que parecía en principio una lesión muscular que le iba a dejar en el dique seco por espacio de no menos de tres semanas finalmente se verá reducido ostensiblemente. Según confirmó el Barcelona, el jugador sufre una dolencia en el bíceps femoral derecho, pero por la que se prevé un periodo de baja de entre 7-10 días.
En consecuencia, el argentino se perderá el encuentro liguero ante el Mallorca, pero podría estar disponible para la vuelta de los cuartos de Champions contra el PSG, o al menos permanecer en el banquillo y salir si fuera necesario.