BENGOETXEA-BEROIZ 13

MTZ IRUJO-ZABALETA 22

Tras casi cuatro meses de durísima competición, Juan Martínez de Irujo y José Javier Zabaleta están muy cerca, concretamente a nueve tantos, de clasificarse para la final del Parejas tras su convincente y sólido triunfo ante Bengoetxea VI-Beroiz, que pudieron pagar mucho más caro su errático comienzo de ayer en el Bizkaia de Bilbo.

Comentaba entre semana el delantero de Ibero que, al haber sido emparejado con un José Javier Zabaleta que pese a su condición de debutante parece jugar mejor cuanto más exigente es el partido, le había tocado una especie de lotería, pero el de Etxarren también está de enhorabuena al haberse encontrado con un Martínez de Irujo tan implicado y constante, con el que ha conformado una pareja hasta ahora demoledora.

Bien conocido el poder de estos dos pelotaris, el secreto del éxito de la dupla de Aspe en este Parejas ha consistido en la constancia y la fidelidad mostrada por ambos al camino elegido. Lejos de desconfiar de un debutante o de querer brillar por encima de los demás, desde el primer momento Martínez de Irujo ha entendido a la perfección que el camino más rápido a una nueva txapela es el de sumar su golpe al de Zabaleta y su insistencia los ha puesto, de momento, cerca del éxito.

Sin un despiste

A pesar de los dos graves errores con los que comenzó el partido el delantero de Ibero, el planteamiento de ayer en el Bizkaia no se movió un milímetro de lo que han venido desarrollando durante todo el campeonato y ayer les permitió descubrir las costuras de la que hasta ahora había sido la pareja más dura.

Sin esa capacidad demoledora, Oinatz Bengoetxea y Beroiz habían hecho de la defensa y la resistencia virtud, y así ganaron incluso a estos mismos rivales en la primera fase. Pero, sin los errores ajenos, su plan de juego se mostró inoperante.

El partido comenzó duro y peloteado, de hecho para el 2-5 se habían cruzado 202 pelotazos, pero los azules aguantaron el cuerpo a cuerpo y fueron los colorados quienes comenzaron a acumular errores. Con Zabaleta poniendo todas las pelotas detrás del seis, hasta en las posturas más complicadas, y un Irujo concienciado en jugar largo, sin meterse en líos en los cuadros alegres, Oinatz Bengoetxea no tuvo opciones de jugar a la contra y ahí se les cruzaron los cables en el momento más inoportuno de todo el campeonato. Si hasta ahora el no fallar había sido su leitmotiv, ayer Bengoetxea cometió hasta dos faltas de saque -uno se le fue fuera al buscar el ancho y otro fue pasa-, mientras que Beroiz también echó pelotas de las que no acostumbra a fallar.

Ahí Irujo se permitió un par de lujos y entre sus preciosos y precisos ganchos y los errores de los colorados, los de Aspe adquirieron amplísimas rentas de hasta 6-19 que cerca estuvieron de dejar muy tocados a los navarros de Asegarce.

No obstante, los colorados entendieron que el tanteo podía ser definitivo y no bajaron los brazos en ningún momento. Fue José Javier Zabaleta el que bajó su nivel en esta parte final del partido, y la pareja de Asegarce lo aprovechó para apuntarse 13 tantos.