Fabian Cancellara logró ayer con más dificultades de las previstas su tercera victoria en la París Roubaix y su segundo doblete con el Tour de Flandes. Sufrió hasta los últimos metros para batir a Sep Vanmarcke al sprint tras una carrera en la que tuvo que responder solo al ataque de sus principales rivales.

Sky y Blanco lanzaron la carrera desde muy lejos al atacar con Boasson Hagen, Thomas y Boom y eso obligó a RadioShack a realizar un esfuerzo extra en una París Roubaix que se corrió a un ritmo altísimo por el viento que sopló favorable y por los continuos ataques.

Eso provocó que Cancellara se quedara sin equipo cuando la clásica entró en su parte decisiva, en la que el Omega movió sus corredores con maestría al colocar a Vandenbergh en la escapada buena que se formó a 40 kilómetros de meta tras un ataque de Vanmarcke al que respondieron también Langeveld y Gaudin. Cancellara estaba sin apoyo de su equipo, nadie colaboraba con él y bajó al coche para hablar con su director para discutir la táctica, lo que aprovechó Flecha para atacar.

El suizo vio que tenía que tomar la responsabilidad y arrancó la moto y solo le pudo seguir Stybar para formar un cuarteto en cabeza con Vanmarcke y Vandenbergh. La desgracia se cebó con los dos Omega, lo que aprovecharon Cancellara y Vanmarcke para irse juntos a la meta.

Acabaron Ricardo García y Erviti

Por detrás Niki Terpstra se fue junto a Gaudin y Van Avermaet para disputarse la tercera plaza del podio que se llevó el corredor del Omega en un velódromo al que llegaron dos vascos, Imanol Erviti y Ricardo García. Juanjo Oroz también habría acabado la prueba de no sufrir cuando iba en el primer grupo una caída que aparentemente no le ha dejado secuelas físicas.