La coalición liderada por la conservadora Unión Democrática Croata (HDZ) logró el 32,27 % de los votos, mientras que el centroizquierda encabezado por el Partido Social-Demócrata (SDP) obtuvo el 31,29 %, según los datos de la Comisión Electoral Estatal (DIP) ofrecidos con el 40 % del recuento ya realizado. En tercer lugar se sitúa el Partido Laborista. Las encuestas previas preveían una victoria de las formaciones de centroizquierda.

Según la televisión pública HTV, esos porcentajes se traducen en seis diputados para los conservadores, cinco para la coalición del SDP y uno para los laboristas. Un empate a seis, entre la izquierda y la derecha.

Las elecciones de ayer estuvieron lastradas por la participación más baja hasta ahora en Croacia, ya que rondará alrededor del 20 %, según los medios de comunicación locales.

Las autoridades de la que fuera república yugoslava, independiente desde 1991, no han conseguido convencer a la mayoría de la ciudadanía de que acudiese ayer a las urnas, pese a calificar de «históricas» estas elecciones.

La brevedad de la campaña, la falta de interés por parte de una población que ve muy alejadas las instituciones europeas y la crisis por la que pasa el país, que ha elevado el paro hasta el 21 %, son algunas de las causas de la baja participación, según los analistas.

En un referendo celebrado en enero de 2012, un 66 % votó a favor de la entrada de Croacia en la UE, con una participación del 43,5 %.

El mandato de los 12 eurodiputados que saldrán elegidos se extenderá desde el próximo 1 de julio, cuando Croacia ingresará en la UE, hasta las elecciones europeas de 2014. Los comicios transcurrieron con calma y sin incidentes, según la Comisión Electoral y la Organización No Gubernamental Gong.

Unos 3,7 millones de electores estaban llamados a elegir a sus 12 eurodiputados entre 336 candidatos de 28 listas. Pero votaron sin pasión, porque están cansados de las negociaciones de adhesión, acompañadas por reformas muy dolorosas.