Cientos de opositores de Margaret Thatcher se reunieron la noche del sábado en Trafalgar Square, en Londres, para celebrar bajo la lluvia la muerte, a principios de la pasada semana, de la ex primera ministra británica, cuyo funeral se realizará el 17 de abril.

Exmineros del carbón que participaron en la huelga que duró un año en la década de 1980 contra el gobierno de la Dama de Hierro se unieron a activistas de izquierda y a estudiantes para brindar por la desaparición de Thatcher. La multitud llevó al pie de la Columna de Nelson una efigie de la exlíder conservadora, ataviada con su característico collar de perlas y un pelo cardado hecho de bolsas de plástico de color naranja.

Un fuerte dispositivo policial fue desplegado en los alrededores, tras los incidentes ocurridos el lunes durante las primeras celebraciones espontáneas en la calle tras conocerse la muerte de Thatcher, víctima de un derrame cerebral a los 87 años de edad. Pero el clima que se respiraba en el centro de Londres era más el de un carnaval callejero, con gente de todas las edades, muchos de los cuales apenas habían nacido cuando ella dejó el cargo, que bailaban, tocaban tambores y hacían ruido con silbatos y bocinas.

No obstante, algunos enfrentamientos con la Policía se produjeron y hubo nueve personas arrestadas, entre ellas cinco por borrachera y por alterar el orden público, indicó un portavoz de Scotland Yard.