Raimundo Fitero
Destinatario
La semana pasada se armó cierto revuelo mediático, con sobrecarga de cinismo partidista, cuando se supo que una subdirectora de los informativos de TVE, Cecilia Gómez, había sido obligada a dimitir por haberse equivocado al mandar un correo electrónico que iba dirigido a Rosario (Charo en la misiva) López, perteneciente al Consejo de Administración de RTVE, por el PP, pero que acabó en la bandeja de entrada de otro consejero. La única equivocación de esa subdirectora fue la del destinatario, pero no de su contenido. Lo habitual es que en estos entes existan mandos intermedios, jefecillos, incluso redactores con aspiraciones que se conviertan en auténticos servicios de información interna y que se dedican a realizar informes de contenido ideológico para descalificar a sus compañeros y trabajadores. Aborrecible método de delación que busca la dominación partidista de redacciones y lugares de decisión.
Claro, puede parecer que el lenguaje empleado sea demasiado cuartelero, porque llama a unas redactoras de los servicios informativos «pertenecientes al Comando Rubalcaba» y al anterior Jefe de Informativos, Fran Llorente, lo califica de miembro de la «avanzadilla de generales». Todo porque existe un Consejo de Informativos que molesta a los actuales dirigentes del ente, al que califica la informante como «monocolor, militante de izquierdas y con vinculación sindical». Anatema. Deben ir rápidamente al infierno. Depuración. No admiten fisuras, quieren tenerlo todo bien atado.
Se equivocó la señora y salió a la luz pública este informe, pero hay que denunciar que son habituales, normales, cotidianos en estos lugares donde los partidos no solamente incuban sus ramificaciones manipuladoras de la opinión pública más desprevenida y sus campañas electorales sino los sustratos económicos de algunas productoras amigas. La reacción de portavoces de otros partidos ante este desliz ha sido ridículo en grado delirante. Para desgracia general, todos hacen lo mismo. Desde hace mucho tiempo se confeccionan listas negras en los entes. La corrupción tiene mil maneras de sustanciarse donde hay dinero público libre de control. Pregunten en los pasillos de EITB.