El parlamentario de Aralar-NaBai Txentxo Jiménez anunció ayer que su grupo ha presentado una moción en la que insta al Gobierno navarro a «paralizar de forma inmediata todas las obras que se están realizando en el tramo navarro del TAP [Tren de Altas Prestaciones, denominación para el TAV que emplea el Gobierno de Yolanda Barcina]», además de reclamar que negocie con las empresas adjudicatarias de los tramos que ya están en obras para rescindir los contratos y que dé por finalizado el convenio suscrito con el Estado español para la construcción de esta infraestructura, por la que el Gobierno navarro adelanta la inversión.

Jiménez justificó la presentación de esta moción en «la intuición, la información y la convicción» que tiene de que el Gobierno español va a modificar sustancialmente el proyecto de «corredor navarro» del TAV, realizando únicamente mejoras en pendientes y curvas en el trazado actual y abandonando la intención de construir nuevas vías. Junto a ello, siempre según Jiménez, se adecuará el ancho de vía actual al europeo mediante la introducción de un tercer raíl junto a las dos actuales.

De este modo, destacó que carecen de sentido las millonarias obras que el Gobierno navarro ya ha adjudicado entre Castejón y Tafalla, «ya que no servirán para nada o serán una isla entre Zaragoza y la CAV».

El Gobierno español habría abandonado también la intención de cumplir el compromiso de enlazar el tramo entre Castejón y la línea Madrid-Zaragoza-Barcelona con vías de alta velocidad, así como de enlazar el «corredor navarro» con la «Y vasca» en Itsaso. Según Jiménez, esta segunda conexión se realizaría mejorando el actual trazado existentes entre Iruñea y Gasteiz, donde enlazaría con la «Y vasca».

Preguntado por el origen de su información respecto al cambio de criterio del Gobierno español, Jiménez se limitó a señalar que tiene «la información, la convicción y la intuición de que va a ser así».

Además, añadió que la nota de prensa difundida por el Gobierno navarro después de que Yolanda Barcina se reuniera con la ministra española de Fomento, Ana Pastor, el 8 de abril para formalizar dos nuevas adjudicaciones de tramos del TAV entre Alesbes y Tafalla señalaba que «este nuevo trazado se conectará con el resto de la red, en una primera etapa temporal, a través de la utilización al máximo de las vías existentes, haciéndolas compatibles con la circulación de trenes en ancho internacional o UIC. Ello permitirá que Navarra se integre en los ejes ferroviarios europeos sin fractura de carga», lo que, a su juicio, supone una confirmación del cambio de planes.

Según avanzó el parlamentario de Aralar-NaBai, el Gobierno del PP anunciará próximamente su cambio de planes y recordó que «todas, absolutamente todas, las obras que le corresponden hacer a Madrid están sin empezar».

También criticó que, tras reunirse el martes en Gasteiz, el Gobierno navarro y el de Lakua instaran a Madrid a que «reactive el estudio y el diseño» de la unión del «corredor navarro» y la «Y vasca».

Protesta, el sábado, en Iruñerria

Por otra parte, vecinos de Etxabakoitz, Zizur y Barañain han organizado para el sábado una jornada de protesta contra el TAV en una zona que se verá afectada por la construcción de la nueva estación de Iruñerria, sobre la que los vecinos no tienen información, según destacó AHT Gelditu.

Los actos comenzarán a las 10.00 con una marcha que saldrá del Grupo Urdanoz, mientras que a las 19.00 partirá una manifestación de la plaza del Ayuntamiento de Barañain.