Acuerdo en Elgeta con una tasa del 70-80% de reciclaje como objetivo
El Pleno de Elgeta aprobó por unanimidad -independientes, Bildu y PNV- un plan de recogida de residuos que elimina el contenedor general verde y mantiene los contenedores de recogida selectiva, equipando algunos con un chip para controlar su buen uso. El plan, que contempla otra serie de medidas, aspira a alcanzar una tasa de reciclaje del 70-80% y será sometido a refrendo popular. Zumaia también podría decantarse por un sistema similar.
Imanol INTZIARTE | DONOSTIA
Nueve meses de trabajo discreto en el Ayuntamiento de Elgeta han dado como fruto un acuerdo a tres bandas sobre cómo recoger los residuos. El equipo de Gobierno -liderado por el exparlamentario de Aralar Oxel Erostarbe-, Bildu y el PNV fijaron en primer lugar el objetivo -una tasa de reciclaje en torno al 70-80%- y a partir de ahí analizaron los diferentes modelos propuestos hasta conseguir uno que satisfaga a todos.
«Comenzamos a hablar hace unos nueve meses para lograr una gestión eficiente. Cada grupo expuso su opinión y diseñamos un proceso», explicó ayer a GARA el propio Erostarbe.
El documento, aprobado por unanimidad en el pleno del pasado lunes y que se puede consultar en la web www.elgeta.org, contempla ocho medidas, comenzando por una campaña para explicar a los vecinos cuál es el ciclo de los residuos y qué se hace con ellos.
También se aboga por facilitar a quienes lo deseen la posibilidad de autocompostar sus residuos orgánicos o por reducir la generación de plástico y papel a la hora de hacer las compras, por ejemplo fomentando el uso de tuppers para la carne y el pescado.
Otros puntos consensuados son la sustitución de las actuales papeleras públicas por otras en las que se puedan depositar los residuos de manera selectiva o la organización de mercadillos de segunda mano para dar una nueva vida a los objetos que no se utilizan.
Sin contenedor verde
Este tipo de medidas ya están implementadas, con buena aceptación y sin rifirrafes, en diferentes localidades. El quid del enfrentamiento radica en la forma de depositar los residuos generados en el hogar. El acuerdo de Elgeta contempla instalar contenedores para orgánicos, plástico, fracción resto, papel, aceite, ropa, pañales y vidrio; mientras que desaparecerá el actual contenedor verde para residuos en general.
Los contenedores de orgánicos, plástico, fracción resto y pañales contarán con un chip y cada vecino tendrá que usar una tarjeta para abrirlos y depositar los residuos. De este modo se controlará el uso correcto del sistema. Está previsto sancionar a quien no separe sus residuos y se aplicarán descuentos en las tasas municipales a quienes practiquen el compostaje.
Una vez al mes, el punto verde móvil de la Mancomunidad de Debagoiena estará en Elgeta para recoger residuos como teléfonos móviles, CDs y DVDs, cartuchos de impresora, pilas o medicamentos caducados, entre otros. Otra opción será acudir a depositarlos a un garbigune.
A partir de ahora se irán poniendo en marcha la mayoría de las medidas, al tiempo que se abre un proceso para socializar el plan.
Consulta en diciembre
«Todas las partes hemos hecho un esfuerzo. Ahora hay que explicarlo a los vecinos. El tema no está cerrado, está abierto a aportaciones. Y una vez completada la propuesta, se votará el pleno para su aprobación y se someterá a consulta ciudadana para su ratificación», indicó el alcalde.
En declaraciones publicadas por www.goiena.net, la portavoz de Bildu, Janire Lazkano, se mostró satisfecha y destacó que el proceso «se ha centrado en los objetivos, y no en los sistemas. Afrontamos esta propuesta como un primer borrador», y matizó que se debe analizar la viabilidad económica.
Patxi Basauri (PNV) destacó que «es muy importante haber alcanzado un acuerdo. Lo hemos hecho entre todos, los demás grupos también han presentado buenas aportaciones».
Según informó eitb.com, en Zumaia podrían decantarse por una propuesta similar, ya que ayer se celebró una reunión de la mesa constituida para debatir en torno a este tema y las fuerzas presentes abogaron por el uso de una tarjeta con chip para controlar lo que se deposita.
El PSE descartó ayer abrir el melón de las consultas populares, pese a su respaldo a la celebrada el pasado fin de semana en Legazpi respecto al sistema de recogida puerta a puerta. Susana Corcuera argumentó que «la plataforma de Legazpi nos llamó, nos pidió nuestro apoyo y se lo dimos. No se trataba de una consulta organizada por un partido».
La secretaria de política institucional del PSE añadió que Bildu debe hacer frente a su responsabilidad y acordar el sistema de recogida con otras formaciones. «Cada ayuntamiento ha de tomar sus decisiones», apuntó, si bien cabe recordar que allí donde se instala el PaP es por decisión del pleno municipal.
Preguntada acerca de si esa filosofía de acuerdo entre todos es extensible a la incineradora, respondió que «hay ya una mayoría institucional» que apoya el plan aprobado durante la pasada legislatura -sin la izquierda abertzale en las instituciones- y que contempla «una planta de valorización energética», que aseguró no es lo mismo que una incineradora, aunque no explicó la diferencia. No obstante, Corcuera matizó que los niveles de generación de residuos han descendido y que se podría volver a estudiar la dimensión de las infraestructuras.
Su compañero Denis Itxaso defendió que la implantación del quinto contenedor, combinada con campañas de sensibilización, permitiría rebasar el 50% de tasa de reciclaje, cifra que no se ha logrado hasta la fecha en las localidades con ese sistema y que está muy alejada del 70-80% que se está logrando allí donde funciona el puerta a puerta. I.I.
El 95% de las familias de Lezo ha recogido ya el material necesario para la puesta en marcha, en la noche del domingo al lunes, de la recogida puerta a puerta.
