Antieuropeísmo y protesta contra la austeridad dominan los comicios locales británicos
Los votantes usarán las urnas para castigar a la coalición de gobierno de Londres y las encuestas auguran una hemorragia de votos conservadores y liberales en las elecciones municipales en Inglaterra y Gales que irían a parar a los laboristas y los antieuropeistas del UKIP.Soledad GALIANA
El partido conservador británico encara las elecciones locales en 34 municipalidades de Inglaterra y Gales con más resignación que miedo. Las encuestas estiman que perderán entre 250 y 500 consejales, y que será el antieuropeísta UK Independence Party (UKIP) el que se beneficiará de sus pérdidas. La desesperación de los tories era palpable en el anuncio del líder conservador y primer ministro británico, David Cameron, que tan solo unas horas de la apertura de las urnas reveló que aceleraría la legislación que permitirá la celebración del referéndum sobre la permanencia en la Unión Europea, una declaración que fue calificada por Nigel Farage, líder del UKIP, como otra «frágil promesa» de Cameron.
El panorama tampoco es alentador para los socios de gobierno de los conservadores, los liberaldemócratas. Su líder, Nick Clegg, ya ha advertido de que su partido podría verse superado por el UKIP en las urnas. Mientras tanto, el líder laborista Ed Miliband siente la presión de la reelección por el escaño abandonado por su hermano David, que los laboristas le exigen vuelva a ganar para el partido.
La exposición pública de los 1.700 candidatos del UKIP no ha estado exenta de polémica, y Farage tuvo que admitir que su partido no había investigado el pasado de sus candidatos, algunos de los cuales han sido destapados como antisemitas o admiradores de Hitler, o que sus propuestas electorales necesitaban ser revisadas ya que sus presupuestos contienen un agujero de 120.000 millones de libras en recortes de impuestos y promesas de inversiones.
Sin embargo, las encuestas de opinión apuntan a que este partido conseguirá el 22 % de los votos, desplazando a los liberales al cuarto lugar en el panorama electoral británico.
El viraje a la derecha racista y antieuropea del líder conservador no detendrá la hemorragia de votos al aún más racista y antieuropeísta UK Independence Party.