Casi a la misma velocidad que el arranque del Manomanista ha hecho que el Parejas sea pasado, una nueva hornada de pelotaris tratará de hacerse un hueco entre los elegidos del campeonato más importante, ese que dicen que da y quita contratos. Sin ser uno de los más jóvenes, a Iker Arretxe -27 años- ya le toca dar un paso adelante en su trayectoria profesional, para lo que debería de eliminar esta tarde en Legazpi (ETB1, 17.30) a todo un clásico de la distancia como Abel Barriola, que cumplirá 35 años en pocos días.

El zaguero de Leitza es consciente de lo fuerte que aprietan las nuevas generaciones y por ello se mostró cauto al ser preguntado por sus objetivos para esta edición del Manomanista. «El objetivo de los 16 es ganar la txapela, pero solo hay una y los que suelen llegar arriba son pocos. Van pasando los años, cada vez más difícil, los jóvenes cada vez vienen más fuertes pero a mí me gustaría llegar arriba, estar en cuartos o por ahí sería una gran alegría. Pero los pelotaris sabemos que debemos mirar partido a partido. Es muy difícil ganar y, si miro más allá, sera muy complicado», apuntó.

Apeado prematuramente del Parejas -desde su eliminación el 23 de marzo solo ha jugado dos partidos-, el de Leitza ha tenido tiempo para preparar bien ese siempre complicado debut en el Manomanista, incluso para tratar de amoldarse mejor a ese nuevo juego que se estila en los últimos años. «Lo que está claro es que, si un pelotari quiere estar al máximo nivel, dominar el juego de aire es imprescindible hoy en día. El saque-remate, la defensa de sotamano, la volea... todo eso es vital para poder ganar partidos y estar arriba. Todos entrenamos eso y me he encontrado bien. Para los zagueros es algo nuevo, pero no cabe duda de que los tiempos han cambiado y que para estar ahí arriba hay que aprender».

La misma piedra

Como el año pasado, Iker Arretxe dará inicio al Manomanista en Legazpi, donde el año pasado cayó eliminado ante Aritz Lasa en un partido en el que comenzó ganando y en el que se le estropeó su derecha. No es la primera vez, ya que un año antes, muy cerca de allí, en Urretxu, el delantero de Aspe volvió a dejar fuera a las primeras de cambio a un pelotari que nunca ha superado la primera ronda. En ese sentido, el de Luzaide quiere quedarse con que, para estar en el campeonato, ya superó la previa de su empresa ante Olaetxea. «He jugado la previa y para mí ya ha comenzado el campeonato. Conseguí ganar y el mano a mano es lo que tiene, que si pierdes te vas a casa y hasta el año que viene».

En ese sentido, tras varios años intentándolo, el Cuatro y Medio, en el que llegó a colarse en la liguilla de cuartos, donde venció a Xala, supuso un espaldarazo y un ejemplo a emular. «Por supuesto, todo lleva su tiempo, hay años buenos y años malos y en este hice un gran Cuatro y Medio. Me veo cada vez mejor, como es lógico, estoy cogiendo cada vez más experiencia y estoy con mucha ilusión y me veo capacitado».

De cara a este duelo, ambos pelotaris eligieron material el pasado martes y Abel Barriola se decantó por pelotas algo más vivas, mientras que Arretxe apartó material algo más difícil de mover. Aunque esté fuera del circuito habitual, el Urbeltz de Legazpi es un frontón noble pero en el que, según Barriola, «la pelota coge mucho peso en el seis y el siete, donde resulta muy difícil defender».