En un acto celebrado en Igorre con motivo del 50 aniversario de la cooperativa Batz, dedicada a la fabricación de componentes de automoción, la empresa anunció su deseo de incrementar su facturación hasta los 300 millones y su plantilla hasta 1.750 personas durante los próximos tres años.

Tras agradecer la labor desarrollada por los fundadores y trabajadores de Batz, el presidente de la Corporación Mondragon, Txema Gisasola, subrayó la implantación de la entidad en el mercado global, «desde Igorre hasta el mundo», y el hecho de que sea capaz de aportar «soluciones competitivas al exigente mercado de la automoción sin perder de vista sus raíces».

Asimismo, incidió en la necesidad de seguir «trabajando duro» y mirar «con optimismo al futuro» para hacer frente a la actual coyuntura de crisis. «El sentido último de nuestro proyecto consiste en contribuir al desarrollo del entorno donde nos ubicamos mediante la creación de puestos de trabajo y el reparto más equitativo posible de la riqueza», subrayó.

También destacó la contribución de Batz a que la industria del automóvil sea más «respetuosa con el medioambiente» y a generar energía de modo más eficiente y sostenido. «Batz representa con ejemplos prácticos algunas de las ideas que desde hace mucho tiempo pretendemos impulsar desde la Corporación Mondragon. Apuesta por la internacionalización para fortalecer las plantas de nuestro entorno más cercano. A mayor índice de multilocalización, mayor desarrollo local de la matriz», indicó, para añadir la importancia de la «innovación, diversión, intercooperación e internacionalización».

300 millones, en 2016

Por su parte, el director general de Batz, Bingen Aranzabal, junto al presidente de la entidad, Ander Bilbao, destacaron que la cooperativa vizcaína, integrada en la Corporación, cuenta con una cifra de negocio consolidada de 230 millones y da trabajo a 1.500 personas.

Batz, integrada en el grupo cooperativo y dedicada al sector de la automoción, fue creada en 1963 y sus áreas de negocio incluyen troquelería y servicios de ingeniería. «El planteamiento es que para 2016 tengamos una facturación cercana a los 300 millones y aproximadamente 1.750 personas», señalaron, para añadir que el crecimiento que plantean «de cara al futuro proviene más del exterior».

Asimismo, remarcaron que la entidad confía en ampliar su plantilla de 700 personas en los centros de Igorre y Zamudio a alrededor de 850 personas antes de 2016. En la actualidad, Batz cuenta con 14 plantas, ocho acuerdos de cooperación y el objetivo de los próximos años pasa por reforzar el proyecto de internacionalización y la apertura de una nueva planta en Rusia o India.