El dictador argentino Jorge Rafael Videla falleció de un paro cardíaco derivado de las lesiones y fracturas que sufrió cinco días antes de su muerte tras caerse mientras se duchaba, según el informe preliminar de la autopsia, confirmado ayer por fuentes judiciales a la agencia oficial Télam.

El informe señala que el domingo 12 de mayo, Videla habría tenido «una caída mientras se duchaba en uno de los baños del Penal de Marcos Paz que le habría producido fracturas en el pubis y en una de sus costillas».

Añade que el exdictador «estaba anticoagulado» lo que, con las fracturas provocadas por la caída, le produjo una hemorragia interna que derivó en un paro cardíaco.

Videla cumplía dos cadenas perpetuas por crimenes de lesa humanidad y otra de 50 años por el robo sistemático de bebés, arrancados de los brazos de sus madres detenidas en el momento de nacer o durante la detención. Actualmente, estaba siendo juzgado por el Plan Cóndor.