SEGUNDA B Final de Liga
Nueve meses de dominio albiazul
La temporada regular concluye con el Alavés como indiscutible campeón. La cruz ha sido para Izarra y Osasuna, que descienden.
Amaia U. LASAGABASTER
Nueve meses después de que el empate entre Amorebieta y UD Logroñés levantara el telón de la temporada, las sonrisas de unos y las lágrimas de otros vuelven a cerrarlo. Los más afortunados tienen todavía una cita con la competición que, si todo va bien, podría prolongarse hasta el 30 de junio en algunos casos. Pero la temporada regular se ha consumido ya y lo ha hecho bajo el dominio de dos colores, el blanco y el azul del Alavés. No el único, pero sí el gran triunfador de la Liga 12/13.
Y es que tras tres intentos fallidos, en los que incluso ha llegado a quedarse fuera de la pelea del play-off, el club parece haber dado con el proyecto, en lo institucional y en lo deportivo, que puede llevarle a reverdecer laureles. Pese a los obstáculos, que los ha habido -sobre todo en forma de lesiones, que han obligado incluso a pasar por el quirófano a varios integrantes de la plantilla-, el Alavés ha liderado el Grupo II desde el primer hasta el último día. Los baches han sido contadísimos y de escasa duración, nada mejor para un torneo que premia la regularidad y que no solo ha permitido al equipo de Natxo González alcanzar sus objetivos, disputar el play-off como campeón, sino que le ha convertido en el mejor equipo de toda la categoría, llevándole incluso a igualar el récord histórico de puntuación que compartían Murcia, Levante B y Mirandés.
Aunque el brillo de los albiazules parece eclipsar al resto, sus acompañantes en el play-off también encabezan el ránking de triunfadores. Lo hace el Eibar, que disputa su cuarto play-off consecutivo, pese a que las apreturas económicas le han obligado a reducir drásticamente el presupuesto general, incluyendo el de la primera plantilla. Aún así, el equipo de Gaizka Garitano se ha revelado durante buena parte de la temporada, prácticamente hasta su final, como la única alternativa factible al dominio del líder. Un rol que, durante algunas semanas ha compartido con el Bilbao Athletic que, desde el próximo domingo, buscará también el regreso a la categoría de plata tras protagonizar su mejor temporada de la última década. Que tampoco puede calificarse de sorprendente, teniendo en cuenta la imprevisibilidad de los filiales y, sobre todo, que José Ángel Ziganda ha trabajado por segundo año consecutivo con un grupo de jugadores que se conocen y vienen demostrando su calidad desde categorías inferiores. Circunstancias que han permitido a los cachorros superar obstáculos en forma de lesiones y que les han llevado a firmar una racha espectacular, completando una vuelta entera sin caer derrotados.
Salvados
Pero el éxito no debe circunscribirse a los primeros puestos por la sencilla razón de que no todos los equipos parten con las mismas expectativas. De ahí que la temporada también deba considerarse positiva para un equipo que ha salvado la categoría solo por el golaverage. Es el caso de la Peña Sport, que comenzó con fuerza en su regreso a Segunda B, pero a la que problemas deportivos -la polémica marcha de Gorka Laborda al Alavés en el mercado invernal, las lesiones...- e institucionales -está dirigido por una Junta Gestora después de que nadie se presentara a las elecciones tras la renuncia de su presidente y ha tenido que pedir un crédito- han estado a punto de pasarle una considerable factura. Dos meses y medio sin poder ganar un partido parecieron condenar al equipo tafallés, pero las tres victorias que ha enlazado en las tres últimas jornadas le permitirán encadenar su segunda temporada en la categoría.
También ha tenido que sufrir hasta el final el Sestao River, al que una plaga de bajas de proporciones cuasi bíblicas ha impedido mantener una línea regular a lo largo de la temporada. Los verdinegros han tenido que esperar hasta la última jornada para celebrar su triunfo más contundente y, sobre todo, certificar la permanencia, objetivo con el que partió en agosto.
A un gol
También era la meta que se marcaba por aquel entonces el Barakaldo, con la categoría recién recuperada. Y durante unos cuantos meses pareció que esa iba a ser su pelea y que, además, no iba a tenerlo especialmente fácil para librarla con éxito. Hasta el punto de llegar a Lezama, acabando la primera vuelta, prácticamente jugándose la vida. El equipo de Iñaki Zurimendi salvó el envite con un empate a cero que acabó convirtiéndose en la primera piedra de una remontada espectacular, que le ha llevado a convertirse en el tercer mejor equipo de la segunda vuelta -37 puntos, frente a los 40 del Alavés y los 38 del Lleida- y a la que solo le ha faltado un gol, el que le privó de la victoria el domingo en La Gaunas, para permitir a los fabriles disputar el play-off. Disgusto postrero que no debe ensombrecer su gran temporada.
En la zona tibia de la tabla también hay dos grandes triunfadores, aunque sus logros pasen más desapercibidos. Probablemente por comparación, en el caso del Amorebieta, que hace un año sorprendió a propios y extraños culminando con la cuarta plaza su primera temporada en Segunda B. Puestos de honor que también ha ocupado durante buena parte de esta campaña. Pero ha acabado haciéndosele larga y concluye en un sexto puesto muy meritorio y que, al menos, le asegura la presencia en Copa la próxima temporada. También estará el Tudelano, que ha coronado su regreso a Segunda B con la mejor clasificación de su historia y -a falta de confirmación oficial- el billete copero.
Problemas
Fuera incluso de esas plazas ha quedado finalmente el Real Unión, al que las apreturas económicas pasan, nunca mejor dicho, factura. Los problemas de cobro de la campaña pasada se han repetido, lo que hace que integrantes de plantilla y cuerpo técnico se replanteen su futuro, y el club txuribeltz, de hecho, tratará de acometer una ampliación de capital en breve.
Más abajo ha quedado el Sanse, aunque con un sabor de boca bien diferente, tras haber salvado la categoría con cierta holgura, aunque no haya podido respirar hasta la recta final del campeonato.
Circunstancia que envidian Osasuna e Izarra, ambos descendidos. Tras nada menos que 26 años consecutivos en la categoría en el caso del Promesas -que podría adquirir una plaza en Segunda B-, al que no parece haberle sentado bien la incorporación de jugadores foráneos. Y en el año de su regreso el Izarra que, tras una primera vuelta desastrosa en la que rozó el desahucio, se renovó por completo y reaccionó para soñar con el milagro prácticamente hasta el final.
Los números
Récord. El Alavés, con sus 82 puntos, ha igualado el récord histórico en Segunda B, que hasta ahora solo habían alcanzado Levante B, Murcia y Mirandés. Es el mejor equipo de la categoría y también el que más victorias ha conseguido, 25.
Artilleros. Aunque no ha podido evitar el descenso del Promesas, Jorge Galán ha sido el máximo realizador del Grupo II, con 16 goles. 14 han marcado Jon Orbegozo (Barakaldo) y Mata (Lleida). El mejor delantero de la categoría ha sido Aridane (Tenerife) con 23 dianas.
Zamora. Xabi (Eibar) concluye como el portero más seguro del Grupo II, con 0'74 goles encajados por partido, por delante de Pau Torres (Lleida) y Etxebarrieta (Amorebieta). En el general de la categoría, el mejor ha sido Francis (Olímpic) con un espectacular promedio de 0'44 goles por partido.
Goles. El Alavés, con 22 goles encajados, cierra la temporada como el equipo con mejor defensa de la categoría. El más realizador ha sido L'Hospitalet, con 66, aunque habiendo disputado dos partidos más que el Bilbao Athletic, que ha marcado 64 y tiene un promedio mejor.
Tarjetas. Los jugadores más tarjeteados de Segunda B son del Grupo II. 22 amarillas ha visto Alberto (Gimnástica) y 5 expulsiones ha sufrido Biel Medina (Lleida).