PSE, PP y UPyD, contra las ayudas «solo a lo que se publica en euskara»
«Prepotencia», «sectarismo», «dirigismo» e incluso nada menos que «estalinismo» fueron algunos de los calificativos que escucharon ayer la consejera Cristina Uriarte y el viceconcejero de Cultura, Joxean Muñoz, por parte de los representantes de PSE y UPyD -PP estuvo algo más templado- en una comisión parlamentaria tensa provocada por la retirada de subvenciones a asociaciones mimadas por el anterior Gobierno. El debate lingüístico, de fondo.
Amaia EREÑAGA | GASTEIZ
Joxean Muñoz, el viceconsejero de Cultura, utilizaba ayer el símil de un saco en el que se han metido distintos agravios para venderlos mejor políticamente. El saco en sí parece que está bastante lleno, a la vista del tono utilizado ayer en la comisión parlamentaria de Cultura y a las distintas iniciativas de PP, PSE y UPyD. Un discurso cuanto menos que chocante para Muñoz, quien no ocultó su preocupación por la «arbitrariedad» de la situación y por los «ataques a la cultura vasca desde la cultura española. Es un debate, aparte de antiquísimo, francamente estéril, arbitrario y poco admisible». Los tres grupos de la oposición seguirán adelante con iniciativas como una proposición parlamentaria que se llevará al pleno del viernes con la finalidad de hacer cambiar al Gobierno algunas partidas del presupuesto de Cultura.
Aunque tengamos presupuestos prorrogados, debido a la falta de apoyos del Gobierno de Urkullu para llevar adelante los suyos, no significa que el ejecutivo disponga del mismo dinero que en 2012, quiso recordar la consejera Cristina Uriarte. Algunas partidas han variado y otras se han reducido o desaparecido... y ahí surge el problema.
Ayudas de hace dos años
Vicente Reyes, del grupo socialista, hacía ayer una relación de las partidas que les han soliviantado: desaparecen la nominativa de 29.000 euros a la Asociación de Escritores de Euskadi (AEE-EIE), mientras que Euskal Idazleen Elkartea recibirá 66.000 euros; tampoco están los 40.000 de la Asociación de Productores Vascos (EPE-APV), y sí al contrario se incrementa de 60.000 a 80.000 la de la asociación Ibaia; además, desaparecen también las ayudas nominativas a la Federación de la Asociación de Librerías (23.000 euros), la Fundación Blas de Otero (28.100 euros) y la asociación liberal bilbaina El Sitio. Unas subvenciones que, ahí está la cuestión, fueron implantadas por el anterior Gobierno de Patxi López.
Para Reyes, la actual consejería de Cultura ha hecho alarde de «dirigismo e intervencionismo» al apoyar, dijo, a unas asociaciones frente a otras «fomentando desde el poder `a unos sí y a otros no'. Eso yo lo tenía olvidado desde que leía a Stalin», agregó. En sus intervenciones, en las que incluso acusó a la consejería de que «le cuesta entender los principios democráticos», habló de prepotencia, de buscar una interlocución única en detrimento de más opciones, como en el caso de Ibaia; de discriminar en función del idioma...
Respecto a la Asociación de Escritores de Euskadi, que congrega a autores que escriben principalmente en castellano, se preguntó varias veces si «la cuestión es ¿por qué financia solo a la asociación que publica únicamente en euskara?» o si a estos «¿les retira la subvención porque no escriben en euskara?». Esta «preocupación» se extiende al PP y a UPyD. Gorka Maneiro, por cierto, recordó que su partido no está a favor de la discriminación positiva del euskara.
Tanto la consejera como el viceconsejero negaron que esta medida supusiera una retirada del apoyo institucional a estas asociaciones, si no que, ante sus diferentes realidades, se les apoyará de forma más lógica. A la Asociación de Escritores de Euskadi, ante su «falta de madurez como asociación», se le ha planteado ayudas a proyectos concretos; a la Fundación Blas de Otero, que casi no tiene actividad -la representante de EH Bildu lo certificó y apuntó que «la ayuda concedida no coincidía con su actividad»- se le encauzará desde patrimonio cultural, a El Sitio «extraña su aparición hace dos años en las ayudas nominativas» por su carácter local y, respecto a lo audiovisual, de donde procede precisamente Muñoz, se «vuelve a la situación anterior» de apoyo a una asociación como Ibaia, que reúne al 80 % del sector.
Se han retirado las subvenciones concedidas por el Gobierno López a la Asociación de Escritores de Euskadi o la Fundación Blas de Otero. Se les apoyará a través de proyectos concretos.
El representante del PNV dijo que lo que se está haciendo es corregir «el dirigismo grosero» del anterior Gobierno, mientras EH Bildu apuntó a la necesidad de impulsar un plan integral de cultura.
En el toma y daca, hubo varios encontronazos dialécticos. Al referirse a la Asociación de Escritores de Euskadi, Estitxu Breñas (EH Bildu) apuntó que «su objetivo principal es impulsar el castellano», un idioma que no necesitaría apoyo, mientras que «aquí quien necesita impulso y apoyo son el euskara y la cultura vasca, sobre todo en época de crisis». Eso no supondría, apuntó ante las críticas de Vicente Reyes (PSE), que los escritores en castellano «sean discriminados, pero sí marcar unas prioridades desde la cultura». Joxean Muñoz, sin embargo, no se mostraba de acuerdo. «El castellano no necesita ayuda, pero los escritores que escriben en castellano necesitan ayuda y son parte importante de nuestra cultura. Son gente imprescindible, eso nos enriquece». Una puntualización, por cierto, que Carmelo Barrio reconoció que fue de su agrado. La cuestión, agregó Muñoz, es que «el tejido cultural sea más rico, pero no a base de regalar subvenciones nominativas». Y más críticas a sus predecesores, porque lo que plantean es una «defensa de nuestra cultura sin que esto suponga menospreciar al resto, cosa que no ocurría en otros casos», dijo Cristina Uriarte. A.E.