Play offs de la NBA
Miami no sabe lo que es perder fuera
La defensa a Paul George hizo que los Heat recuperaran el factor cancha. Los compañeros de LeBron James dieron un paso adelante.
GARA | BILBO
Después de que Indiana Pacers ganara el segundo partido de la final de la Conferencia Este, los analistas dieron un respingo. El conjunto de Indiana aún no había perdido en su feudo, de modo que para las huestes de los Heat, imponerse en Bankers Life Fieldhouse iba a convertirse en una prueba casi de vida, toda vez que en la Liga regular no fueron capaces de lograr imponerse en Indianápolis.
Obviamente, el 96-114 del tercer partido muestra a las claras que Miami ha pasado esa prueba, y con nota. Habrá que convenir, no obstante, que los análisis no mencionaban que, hasta la fecha, Miami Heat tampoco sabe lo que es perder cuando juega lejos de su cancha. Paradojas de estos play offs, las dos únicas derrotas de los Beach Boys -al menos, por ahora- han venido en el American Airlines Arena.
En muchas ocasiones se ha cargado sobre las espaldas de los compañeros de LeBron James la falta de ayuda a su gran estrella; las cosas como son, The Choosen One esta vez tuvo a sus compañeros en su mejor nivel. De hecho, el propio LeBron bajó sus prestaciones a niveles más mundanos -22 puntos y 4 rebotes-, pero el resto del quinteto titular dio un paso adelante: 18 tantos y 8 asistencias para Dwayne Wade, 17 puntos y 7 rebotes de Udonis Haslem -con 8 de 9 en tiros de campo-; 15 tantos para Chris Bosh y 14 para Mario Chalmers. Desde el banquillo, Chris Birdman Andersen añadió 9 puntos y 9 rebotes y hasta Battier, Cole y Ray Allen colaboraron para que los de Eric Spoelstra pusieran el 2-1 en la eliminatoria.
70 puntos al descanso
Los Heat aumentaron una marcha en su ritmo de anotación, rompiendo el partido virtualmente ya para el descanso, al que llegaban con un majestuoso 56-70 en el marcador. Esos 70 tantos son récord de la franquicia en unos play offs.
Era obvio que ese ritmo iba a decaer tras el receso. Frank Vogel y los suyos volverían a la carga -Roy Hibbert debió causar baja durante unos minutos de la primera mitad a causa de unos problemas estomacales-, tanto en defensa como en ataque. Y sí, la defensa aumentó sus prestaciones, pero no su ataque. Paul George, una de las mayores sensaciones de esta eliminatoria se quedó en unos pobres 13 puntos, tristes fruto de una carta de lanzamiento de 3 de 10 en tiros de campo y 5 de 8 en tiros libres. El mismísimo LeBron James se encargó de «secar» a la estrella de los Pacers, liberado de la obligación imperiosa de anotar.
La falta de puntos de Paul George lo suplieron Roy Hibbert, que cuando regresó volvió a imponer su ley en la zona -20 puntos y 17 rebotes, aunque con un mal 4 de 12 en tiros de campo-, David West -21 puntos y 10 rechaces- y George Hill -19 puntos-. Pero sin los puntos ni genialidades de su estrella -a pesar de todo, repartió hasta 8 asistencias-, y con los titulares de los Heat anotando a toda máquina, la remontada se fue volviendo cada vez más difícil, hasta volverse del todo imposible con el 96-114 final.
Datos estadísticos
Tras este 2-1 para los Heat, hay quien tira de datos estadísticos para apuntalar el favoritismo de los de Florida.
Por un lado, en una serie de play offs a siete partidos, estando empatada 1-1, el que gana el tercer partido consigue llevarse la serie en un 77% de las ocasiones -151-45-. Asimismo, el equipo que entrena Eric Spoelstra no ha perdido dos partidos consecutivos desde hace más de cinco meses, y fuera de su cancha lleva una racha de 23 victorias en sus últimos 24 partidos.
Aunque la anotación de LeBron James fue más baja que en días anteriores, los Miami Heat anotaron mucho más. El quinteto titular sumó un mínimo de 15 puntos, y el equipo de Florida llegó a los 70 al descanso, récord absoluto de la franquicia en los play offs.
No fue el mejor día de Paul George, frenado en seco en defensa, sumando 13 tiros con una carta de lanzamiento de 3 de 10. En general, los Pacers mostraron un grave desacierto, 29 de 73, que no pudieron compensar con su dominio del rebote.
A estas alturas se sabrá si San Antonio Spurs ha ganado 4-0 la final de la Conferencia Oeste o si los Memphis Grizzlies han sumado el 3-1. Pero lo que parece claro es que los Spurs lo tienen todo casi listo para volver a la finalísima de la NBA desde 2007.
Uno de sus miembros es Tiago Splitter. Una radio española hablaba ayer del interés del Real Madrid en el brasileño. No obstante, parece difícil que el pívot exbaskonista, que será agente libre restringido a partir del 1 de julio, deje la NBA. Splitter se ha hecho con la titularidad de los Spurs, y en play offs promedia 6,6 puntos, 3,8 rebotes y 1,5 asistencias en 23 minutos, siendo un referente en defensa. GARA