El presidente del Euzkadi Buru Batzar del PNV, Andoni Ortuzar, instó ayer a ETA a que entregue las armas a las instituciones de la CAV para que «sea la sociedad vasca la que las destruya», en lugar del Ejército español y la Guardia Civil. En su opinión, esta acción supondría un gesto simbólico para avanzar hacia la «solución» del conflicto que padece Euskal Herria.

Según recogió la agencia Europa Press, Ortuzar, que realizó estas declaraciones en un desayuno informativo celebrado en Bilbo, defendió esta opción para acabar con el «inmovilismo» actual. «Como ciudadano vasco no entiendo que ETA prefiera entregar sus armas a la Guardia Civil o al Ejército español antes que a las instituciones vascas, a una representación de este país. Sería más justo y constructivo que se las entregara a esta sociedad», insistió.

«Lo que ETA tenga que hacer, lo tiene que hacer ante las mujeres y los hombres de Euskadi porque se lo debe. Si quiere hacerlo con acompañamiento y verificación internacional, bienvenido sea ese comportamiento, pero ante Euskadi, ante la sociedad vasca», señaló.

Mientras, no hizo ninguna petición a los estados español y francés. Es más, lejos de interpelar a La Moncloa o al Elíseo, que mantienen políticas de excepción respecto a las presas y los presos vascos, pidió a ETA nuevos pasos unilaterales «como el desarme o el reconocimiento del daño causado». En definitiva, Ortuzar reclamó más «gestos para la convivencia, sin esperar a nadie ni nada».

«Si el proceso era unilateral, que lo siga siendo, independientemente de lo que piense Madrid. Yo creo que, si al Gobierno español se le acaban las excusas y las razones, como la de que ETA sigue teniendo armas, seguramente se verá más impelido a moverse», añadió ante los asistentes al acto de Forum Europa, entre quienes se encontraba el presidente de la Alianza de Liberales y Demócratas Europeos (ALDE), Graham Watson.

En su relato, Ortuzar comentó que, una vez ETA haya efectuado el desarme, «ya habrá tiempo de ser firmes y constantes ante Madrid en la reivindicación de otra política penitenciaria y en la búsqueda de una solución para lo que se denominan `las consecuencias del conflicto'».

Antes de finalizar su intervención, el presidente del EBB, que atribuyó al PNV el «papel discreto de facilitador» en la resolución del conflicto, incidió en que su partido «apoya y apoyará en la buena dirección» las conclusiones del Foro Social por la Paz celebrado el pasado mes de marzo en Iruñea y Bilbo.

«Ilógico e irresponsable»

Por su parte, el secretario general de EA, Pello Urizar, calificó de «ilógico e irresponsable» plantear que ETA entregue las armas en una «campa o en una comisaría», tal como defendió el año pasado el ministro de Interior español, Jorge Fernández Diez. «Eso nunca ha sido así», recordó en relación a otros conflictos, antes de destacar que esta no es la formula adecuada. «Para asegurarnos de que se hace bien, se debe hacer de manera ordenada», puntualizó.

En una entrevista concedida a Onda Vasca y difundida por Europa Press, Urizar destacó que el proceso de paz deberá llevarse a cabo con agentes neutrales «que garanticen, con personas o entidades con garantías a nivel internacional, que las cosas se hacen como es debido».

En cuanto a la labor de la Ponencia de Paz puesta en marcha en la Cámara de Gasteiz, el parlamentario señaló que a las formaciones que integran EH Bildu les parece «injusta» la imagen que tratan de plantear ciertos partidos políticos: «Algunas formaciones obvian que aquí ha habido sufrimiento por más de una parte, que ha habido injusticias y que hay que sacar a la verdad todos los casos».

«Quieren centrarlo todo en un sector y, aun reconociendo que quizás el daño mayor causado sea el de ETA, quizá es de mayor calado aquel que hacen los organismos que teóricamente por ley tienen que proteger a la ciudadanía, es decir el Estado», manifestó.

Lamentó que el PP no sienta ninguna presión por parte de terceros para tomar parte en la ponencia. «EH Bildu sí la hubiera sentido si no hubiera accedido y al PSE tampoco le vemos con demasiadas querencias», indicó Urizar, que criticó al PNV por «no trasladar la presión donde debe», en alusión a la posición defendida por la derecha española.

«La semana siguiente al acto de Aiete, algunos dirigentes del PP vasco trasladaron mensajes en el sentido de generar esperanza, pero eso terminó porque la política la marca Madrid. No podemos dejarles actuar con comodidad, hay que ejerceles presión», advirtió.