Brasil se impuso 3-0 a Japón en el partido inaugural de la Copa Confederaciones disputado anoche en el Estadio Nacional de Brasilia. Un gol al comienzo de cada parte, y el postrero en el descuento, bastó a los anfitriones para sumar sus primeros puntos en el Grupo A ante una selección nipona muy aplicada pero con poca mordiente.

Neymar adelantó a los brasileños antes de que se cumplieran los tres minutos de juego. El jugador recién fichado por el Barcelona empalmó una espléndida volea desde fuera del área para enchufar el balón por toda la escuadra. Al inicio de la segunda mitad, fue Paulinho, el jugador del Corinthians, el que remató el esférico dentro del área, en un lanzamiento que dejó en evidencia al portero nipón Kawashima, guardameta del Standard de Lieja. Jo, del Atlético Mineiro, cerró la cuenta en el minuto 93.

Hoy por la noche se disputan otros dos encuentros. A las 21.00 se enfrentan México e Italia, en el choque que completa la primera jornada del Grupo A. A la medianoche comenzará el España-Uruguay, primer partido correspondiente al Grupo B.

Protestas. Una manifestación contra los millonarios gastos del gobierno para el Mundial en Brasil logró infiltrarse hasta las puertas del estadio nacional Mané Garrincha de Brasilia el sábado, horas antes del puntapié inicial de la Copa FIFA Confederaciones. ``A la Copa del Mundo renuncio, quiero más dinero, salud y educación'' es el lema que coreaban los manifestantes, unos 500 según la policía y 1.000 de acuerdo a los organizadores, principalmente jóvenes. ``¡Quien no salte, es de la FIFA!'', repetían los manifestantes en rechazo a los 15.000 millones de dólares que el gobierno prevé destinar a inversiones públicas para el Mundial 2014. Las denuncias también se han realizado en otras ciudades.

Las protestas tienen lugar además en momentos en que Brasil experimenta un débil crecimiento económico y una inflación de 6,5% anual, en el techo de la meta oficial.