SEGUNDA B | El Alavés, campeón de la categoría
La guinda a un año irrepetible
Aunque el último partido de la temporada se saldó con derrota, la ventaja con la que llegaba al Rodríguez López permitió al Deportivo Alavés proclamarse campeón de Segunda División B. Borja Viguera anotó para los albiazules y acaba el curso con 18 goles.
TENERIFE 2
ALAVÉS 1
GARA | SANTA CRUZ DE TENERIFE
El Alavés rubricó en la eliminatoria de campeones lo que ya había demostrado en los meses previos, que esta temporada ha sido el mejor equipo de toda la Segunda B. Concluyó el campeonato regular con los mejores números de la categoría, lo confirmó alcanzando a la primera el que realmente era su objetivo, el ascenso, y en esta última txanpa no ha hecho sino poner la única guinda posible, conquistar el título de campeón de Segunda B, a un año irrepetible.
Irrepetible en el más amplio sentido del término. Porque es ciertamente complicado firmar una campaña, en cualquier categoría, similar a la que han protagonizado los albiazules y, sobre todo, porque la familia alavesista no quiere volver a hacerlo. O, más exactamente, no quiere tener que volver a hacerlo. El Alavés regresa al fútbol profesional y confía en que sea para quedarse, incluso en un peldaño superior en un futuro no demasiado lejano.
Curiosamente, el último encuentro de una temporada tan brillante, se saldó con derrota. Pero la ventaja que se llevaron los gasteiztarras de Mendizorrotza les acabó dando la eliminatoria. Y no fue porque el Tenerife no intentara lo contrario. Lejos de dar por perdidas sus posibilidades, el cuadro canario salió en tromba y logró nivelar el resultado global en apenas media hora, con un doblete de Aridane. El Alavés, por fortuna, reaccionó para acortar distancias y aguantar después, pese a acabar con nueve jugadores, las acometidas de su rival.
30 minutos letales
Lo cierto es que el choque no pudo empezar peor. Antes de que los albiazules se dieran cuenta, el Tenerife se había metido de lleno en la pugna por el título gracias al primer gol de Aridane. Urtzi despejó mal un centro desde la banda y el delantero grancanario apareció en boca de gol para empujar la pelota al fondo de las mallas. Emoción en el Heliodoro y un Alavés que, entre el agobio del público, la presión del Tenerife y el calor, empezaba a dar síntomas de flaqueza. Todo ello se confirmó poquito antes de cumplirse la media hora. Córner y Aridane que volvía a aparecer para igualar la serie por el título.
El segundo gol local, al menos, sirvió para que despertase el Alavés, que no tuvo más remedio que empezar a proponer algo de fútbol. La recompensa llegó de inmediato porque a diez minutos del descanso Sergio Rodríguez derribaba a Borja Viguera en el área y el propio ariete riojano se encargaba de recortar distancias y volver a arrimar el ascua a la sardina albiazul.
A partir de ahí tocó aguantar. Y eso que el colegiado no se dio cuenta de que mostraba la segunda amarilla a Juanma y el atacante pudo seguir jugando hasta el descanso, cuando el árbitro se percató del error. Así que el Alavés comenzó el segundo tiempo con diez y las cosas se pusieron aún peor antes del cuarto de hora porque Manu García también veía la roja.
Con solo nueve hombres -a lo que hay que añadir que Gorka Laborda se lesionó y apenas aguantó un cuarto de hora sobre el césped-, el cuadro alavesista tuvo que sufrir para contrarrestar las acometidas tinerfeñas. Los de Álvaro Cervera buscaron con ahínco un gol que les acercara al título y mermara psicológicamente a los albiazules, pero estos tiraron de oficio defensivo y se dejaron hasta la última gota de sudor sobre el césped del Heliodoro para hacerse con el trofeo.
Borja Viguera
Nuevo gol decisivo del riojano, que confirma al Alavés como el mejor de los 81 equipos de Segunda B. Redondeó su espectacular final de temporada con el gol y también se enfundó el traje de faena en el segundo tiempo, cuando tocó apretar los dientes.
Los cinco goles que ha anotado el Alavés en el play-off han llevado la misma firma, la de su pitxitxi Borja Viguera, que cierra la temporada con 18 tantos.
Con los 70 minutos sobre el césped del Heliodoro, Sendoa Agirre, que cumplirá 38 años en diciembre, dijo adiós al fútbol profesional tras una larga trayectoria.