Irakurri se encuentra en el cordal que establece los límites de Zuberoa con Biarno, donde los pueblos de Montori y Hauze se dan la mano con el de Lana (Lanne-en-Baretous), entre el picudo monte Argibiela y la cumbre de Iguntze y Arubuti, cumbres centrales del macizo montañoso de Izarbe. Un alargado cordal que supera los 1.500 metros de altitud se impone en el paisaje con su espectacular y denso bosque de hayedo-abetal, encerrando por su vertiente contraria el encajonado valle de Santagrazi.

El itinerario se mueve por la parte alta del valle de Barlanés, cuajado de caseríos y granjas pertenecientes al pueblo de Lana. En su parte alta se entra en territorio de Montori, donde la densa masa forestal atrae constantes lluvias y la niebla. La sombra que ofrece la techumbre arbolada y las numerosas regatas que hay en el camino, convierten a esta excursión en una opción ideal para el verano. Una vez más, la propuesta será en sentido circular.

Una vez en el Puente de Blancou (463 m.), está la carretera que inicia la subida a la estación de esquí nórdico de Izarbe. Aquí dejaremos el coche en el desvío del carretil de la derecha. Unos metros más abajo, donde hay unos contenedores de residuos, se encuentra el carretil de retorno de esta excursión. Sin más el itinerario arranca por este carretil que nos llevará junto la regata a una zona abierta donde entre prados se encuentran varios caseríos. Una vez en un cruce de tres pistas, a la altura del caserío Pipet, continuar por el carretil central.

Conforme vamos avanzando tendremos enfrente a la derecha la pelada cumbre de Irakurri y a nuestra espalda el airoso monte Soduze. Poco después de dejar a nuestra izquierda el viejo caserío Cheme, frente una vivienda moderna dejamos los prados y fincas para adentrarnos en la penumbra del bosque. Poco después ante un puente, abandonamos el carretil que lleva al caserío Txin. Sin cruzar el puente continuar por una pista de tierra donde veremos enseguida carteles que nos informan que entramos en tierras de Montori.

Junto la regata el camino nos lleva entre una variada gama de especies arbóreas autóctonas. Una vez situados ante una caseta de captación de agua, la pendiente se agudiza, al tiempo que salimos del bosque. A nuestra derecha veremos más arriba ya cercana la cumbre de Irakurri y tras continuar bajo el bosque saldremos al amplio collado de Urdaburu (844.). Aquí estaremos ante un cruce de cuatro pistas. A la izquierda, junto una vieja borda el camino que sube al cordal de Izarbe, y a la izquierda la pista principal (todo uno) que lleva al collado de Bezalaga, paso a ir a Hauze.

Desde un visible abrevadero continuaremos la marcha ganando altura por la ladera herbosa hasta alcanzar la pequeña cumbre de Irakurri (930 m.). El paisaje se abre hacia las tierras llanas de Maule con las cumbres más norteñas del herrialde al fondo: Ahargo y Kanbillon entre Barkoxe, Madalen sobre Atharatze, el macizo de Arbaila, sobre Altzürükü el imponente pico de Ori y las montañas de Irati con el cabezón de Okabe. Finalmente, como contraste, el alzamiento del relieve de las vecinas montañas de Baretous y del bajo valle de Aspe. Sobre nuestras cabezas el cordal de Izarbe, con la pelada cumbre que da nombre el macizo.

El regreso lo haremos por el altiplano cimero donde hay un humedal. De este lugar bajaremos sin senda definida por un terreno abierto, para enlazar con el cordal situado sobre el collado de Legazaga (729 m.), abierto entre Irakurri y Aranuaga. Enfrente veremos el picudo monte Beguze, a su izquierda Hauze y arrumbado a su derecha el pueblo de Montori. Tras bajar por una fuerte pendiente estaremos en el collado, donde hay un bosquete de abetos y un abrevadero. El camino que lleva a Barlanés suele estar bastante cerrado por lo que es mejor continuar por una visible senda para, una vez en los primeros árboles, bajar a otra más definida y que se convertirá en camino, una vez entremos en el bosque.

Una vez ante una borda en ruinas y una alambrada seguiremos por el interior de un túnel de avellanos hasta dar con un prado. Sin dejar la alambrada se alcanza un edificio con un abrevadero y un portillo que cruzaremos en dirección a un caserío por un amplio camino donde daremos con un carretil que dejaremos más delante, donde se encuentra una nave con perrera y el caserío Orrarie. Sin llegar a él, tomar a la derecha un camino herboso donde veremos las señales amarillas de un sendero PR. El camino se convierte en senda nuevamente bajo el bosque hasta salir al carretil que hemos dejado en Orrarie, a escasos metros del puente de Blancou.