«El convenio no se vende, se defiende» fue uno de los lemas coreados ayer por los trabajadores del Metal de Gipuzkoa durante las movilizaciones del que fue su segundo día de huelga en defensa del convenio provincial y de empresa ante la reforma laboral y el fin de la ultraactividad, con un seguimiento similar al del lunes -cerca del 65%-, según LAB. Interpelaron directamente a su interlocutor en las negociaciones, que no es otro que la patronal, Adegi, en cuya sede se encadenó un grupo de trabajadores de diversos sectores a punto de perder su convenio.

Junto a ellos, permaneció una multitud de personas que acudió a las inmediaciones de Adegi formando una larga caravana de coches. Pocos minutos después de su llegada, dos furgonestas y varios coches de la Ertzaintza acudieron al lugar, mientras los presentas gritaban consignas en defensa de unas condiciones laborales dignas y mensajes de ánimo a los encadenados.

La llegada de la Ertzaintza generó momentos de tensión y algún que otro forcejeo con los manifestantes que acusaban a Adegi de abocar a miles de trabajadores a la pérdida de los derechos laborales adquiridos durante años.

Entre gritos de «Adegi, lapurrak», los agentes cortaron la cadena que amarraba a los trabajadores a la entrada del edificio y tras identificarlos y comunicarles que serán acusados de desórdenes públicos, les dejaron marchar para ser recibidos entre los aplausos de sus compañeros.

Último impulso hasta el día 7

Terminada la protesta, la representante de LAB Lurdes Eraso declaró que, de aquí al 7 de julio y también después, seguirán denunciando el «inmovilismo» de la patronal y reivindicando los convenios de ámbito provincial y de empresa. Hicieron hincapié en que ambos ámbitos son complementarios para hacer frente a la reforma laboral, que resta valor a los primeros para legislar según el ámbito estatal o, en su defecto, del Estatuto de los Trabajadores, que, según destaca LAB, contempla unas condiciones peores.

Eraso enumeró una serie de mínimos que reclaman en todos los sectores, como son la actualización de los salarios en base al IPC, la prolongación de la ultraactividad y la no aplicación del arbitraje obligatorio en los casos de descuelgue.

A juicio de LAB, los convenios sectoriales deben seguir siendo una referencia y marcando unos mínimos en las condiciones de trabajo. Por ello, llama a dar un último impulso a las movilizaciones en defensa del blindaje de los convenios ante la reforma.

«Con la reforma laboral en las manos, Adegi debilita nuestros salarios y nuestras condiciones laborales, nos roban nuestros derechos», manifestó Eraso. Valoró positivamente el seguimiento que han tenido las dos jornadas de huelga en el Metal y recordó que mañana tienen una nueva cita, extensiva a todos los sectores sin convenio actualizado, que contará con el apoyo de CCOO, UGT y ESK. Todas las centrales se movilizarán de forma unitaria a las 12.00 desde el Boulevard donostiarra.

La huelga de mañana también se extenderá a Araba y Bizkaia. Ayer, un total de 19 comités de empresa de Araba anunciaron su adhesión a la convocatoria de huelga. Entre los comités que se han sumado al paro figuran los de empresas como Aernnova, Tubacex Llodio, Tubos Reunidos Amurrio, Sidenor, Giroa, Condesa Inox y Fabril, Fiasa, Herdit y MCM, entre otros.

Para el día 28, LAB anuncia nuevos paros y huelgas y, todo apunta a que la agenda se irá llenando hasta el 7 de julio.