Mandela se debatía entre la vida y la muerte rodeado por los suyos
Tras una anterior semana de anuncios esperanzadores, la biología (casi 95 años) y la biografía (27 de ellos enterrado en vida por el Apartheid) se imponen y Sudáfrica espera resignada el adiós de Nelson Mandela. Justo en la semana en la que se espera a Obama en Pretoria.
GARA | PRETORIA
Sudáfrica se preparaba para lo peor, convencida de que el libertador Nelson Mandela se debatía entre la vida y la muerte, rodeado por su familia y por su entorno político.
Madiba «sigue en estado crítico en el hospital», declaró el actual presidente sudafricano, Jacob Zuma, ante la prensa internacional en Johannesburgo, repitiendo los términos utilizados la víspera por el Gobierno para anunciar el brusco empeoramiento del estado de salud del expresidente y principal artífice del triunfo contra el sistema del Apartheid.
«Los médicos hacen todo lo posible por asegurar su bienestar y su confort», añadió. «Fui al hospital ayer (domingo) por la noche. Le vimos y hablamos con los médicos y su compañera, Graça Machel. «No estoy en condiciones de darles más detalles, yo no soy médico», se excusó Zuma durante una rueda de prensa convocada hace tiempo para analizar las elecciones del año próximo.
Madiba cumple 95 años el 18 de julio. Pero arrastra desde hace dos años y medio infecciones pulmonares que le han obligado a ser hospitalizado cuatro veces desde diciembre. Su dolencia está relacionada con la tuberculosis que padeció durante su larga condena (27 años) en unas condiciones verdaderamente inhumanas.
Winni Madikizela-Mandela, su antigua compañera de lucha contra el Apartheid de la que Madiba se divorció en 1996, volvió el lunes al mediodía a la Clínica médica Heart de Pretoria de la que no sale ni de noche ni de día su actual compañera.
También se acercó a las instalaciones Zenani Mandela-Dlamini, hija del expresidente.
Visita de Obama
El presidente Zuma aseguró que la visita del presidente de EEUU, Barack Obama y en el marco de su gira africana, se mantiene como es previsto. Su gira arranca el miércoles en Kenia pero no se le espera hasta el fin de semana en Pretoria.
El repentino anuncio del empeoramiento en el estado de salud de Madiba ha pillado a contrapie a muchos, entre ellos a los corresponsales extranjeros que habían vuelto a casa.
Alguna cadena como la estadounidense CBS mantenía el pesimismo asegurando que Mandela tuvo que ser reanimado a su llegada al hospital y que su hígado y riñones funcionaría solo al 50%.
«Todos debemos aceptar como país que Madiba es ahora mayor, que tiene 94 años», comentó el presidente Zuma durante un encuentro con la prensa local e internacional