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Saski Baskonia

Hamilton cruza Altube y jugará dos años en Gasteiz

El pívot de Brooklyn ha promediado 13 puntos en Bilbao Basket. Destacó ante todo al inicio de la campaña.

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Arnaitz GORRITI

Era un secreto a voces que, al fin, ayer se hizo oficial. Lamont Hamilton, una de las revelaciones de la pasada temporada de la Liga ACB Endesa -sobre todo durante la primera vuelta- ha cruzado Altube y jugará en las filas de Laboral Kutxa Baskonia las próximas dos temporadas. El pívot de Brooklyn ha encandilado por motivos como su contundencia debajo del aro -llegó a romper un tablero en el duelo de Miribilla ante Unicaja-, su movilidad y su buena mano.

El pívot de Brooklyn, que antes de recalar en Gasteiz ha jugado en dispares equipos como Inca Tenerife, Paris Levallois y Bilbao Basket, después de haberse formado en la prestigiosa universidad de St John's, promediaba 13,1 puntos y 5,6 rebotes, con una valoración de 14,9 en la competición doméstica, mientras que en la Eurocup firmaba unos números parecidos: 13,2 puntos y 5,2 rebotes, para una valoración de 14,9.

Habrá que ver cómo lo ubica Sergio Scariolo, pero lo cierto es que en principio, ya que Lampe y Pleiss también tienen contrato -y en el caso del polaco, es cupo de formación, así que hallar un sustituto se antoja aún más complicado-, Hamilton jugará indistintamente de pívot y ala-pívot. El problema, de haberlo, estará en la faceta defensiva. Jugando de pívot, Hamilton ha sufrido sobremanera ante pívots grandes y pesados -solo hay que recordar el «maltrato» que ejerció sobre el neoyorquino un correcto jugador como Xavi Rey en la pasada Copa- mientras que carece de velocidad para marcar a los rápidos ala-pívots que estila el basket actual.

Hamilton, de 29 años y de 2,08 metros de estatura, aunque llegara un poco pasado de peso a Bilbo y sufriera una lesión muscular a las primeras de cambio, sorprendió en la primera parte de la temporada gracias a un juego agresivo cerca del aro, que encandiló a los espectadores de Miribilla y también a los rectores de varios equipos, que suspiraban por él descaradamente. Más aún, con la campaña aún en juego, y después de conocerse los problemas financieros de Bilbao Basket, llegó a darse por hecho el fichaje del jugador estadounidense al otro extremo de la A-68. Hamilton se apresuró a desmentirlo, alegando que «sigo centrado en el equipo y no hablaré de mi futuro hasta acabar la temporada».

La segunda mitad de la misma no fue tan productiva. Las lesiones entre los interiores bilbainos hicieron que Hamilton debiera jugar más minutos de los habituales, dosificándose en exceso, tanto en ataque como en defensa. Por último, decepcionó un tanto en la final de la Eurocup así como en los play offs, en el que se le vio, como a todo su equipo, justo de fuelle.

Nemanja Bjelica

El fichaje de Lamont Hamilton «condena» prácticamente a Milko Bjelica, aunque su salida estuviera prácticamente cantada.

El caso de Nemanja Bjelica es distinto. Aunque Josean Kerejeta afirme no saber nada ni del interés de los Wolves o del Barcelona, lo cierto es que tanto unos como otros están ahí, al acecho. Los Minnesota Timberwolves están a expensas de lo que suceda con Kirilenko para incorporar al ala-pívot serbio, mientras que el Barcelona pretende pescar en ese río revuelto.

El Baskonia perdería a un gran jugador, pero ganaría dinero. Según la web encestando.es, «el club gasteiztarra se va a llevar o más de un millón de dólares si Bjelica acaba en la NBA o más de un millón de euros si el Barça contrata al ala-pívot».

Gabriel, a Bilbo a falta de confirmación

Otro secreto a voces es el regreso de Germán Gabriel a las filas de Bilbao Basket nueve temporadas después. Falta la confirmación oficial, pero la web solobasket.com ya se encargaba de afirmar que el ala-pívot nacido en Caracas dejará Estudiantes y se vestirá de negro las dos próximas temporadas.

La página web encestando.es añadía además que «Gabriel tenía el compromiso por parte de Estudiantes de ser libre para dejar el club madrileño en el caso de que llegara una oferta superior en el aspecto económico», una oferta que llega por parte del conjunto vizcaino para completar su plantel con una inacabable secuencia de veteranos.

Por contra, como bien es sabido, Nikos Zisis no seguirá en las filas bilbainas. El base heleno es un seguro de toda garantía en el concierto baloncestístico continental, y los conjuntos que van a disputar la Euroliga, algo precido al futuro que espera a Kostas Vasileiadis. En ese sentido, Alex Mumbrú advertía que «el presupuesto ha bajado y seguramente los jugadores que vengan no sean de la misma talla». GARA

Hanga y «el santo»

La probable llegada de Adam Hanga al Baskonia crearía un «overbooking» de aleros al coincidir con Nocioni y San Emeterio. Con el argentino renovado, es el cántabro quien tiene las papeletas de salir. Pero según lo declarado por él a Radio Vitoria, «nadie se ha comunicado conmigo ni con mi agente para decir que me busque equipo».

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