Los ediles de UPN lo pasaron mal ayer en la procesión, pero hubo quien acabó peor. La giganta Braulia tuvo un percance serio y se partió el cuello mientras marchaba, con sus compañeros de Comparsa, por la calle Mayor para honrar al santo moreno.

La herida era seria, pero Braulia, como los jugadores de casta, quiso mantenerse en el campo y acabar la procesión. Sin embargo, los técnicos de la Comparsa estimaron que era mejor que se retirase al vestuario de la Estación de Autobuses para recibir el tratamiento adecuado para permitir que hoy vuelve a ofrecer solaz a niños y mayores por las calles de Alde Zaharra de Iruñea. Y es que eso de romperse el cuello no puede traer nada bueno y no es cosa de perder la cabeza sobre cualquier adoquín aunque estemos en Sanfermines.

En forma pese a la edad

Braulia, al igual que sus otros compañeros gigantes nació en 1860 de las hábiles manos del artesano Tadeo Amorena. Mide 3,90 metros, que ascienden a 4,20 metros cuando la carga el porteador. Pese a su edad y su tamaño, Braulia es capaz de bailar frenéticamente durante sus salidas por las calles de Iruñea. La multitud que se agolpa a su paso y el calor que habitualmente hay en esta época del año no son ningún obstáculo.

Braulia es la Reina Americana y su compañero en Toko-Toko. Las otras parejas representan a Asia (Sidi abd El Mohame y Esther Arata), Europa (Joshemiguelerico y Joshepamunda) y África (Selim-pia Elcalzado y Larancha-la).