Por enésima vez en lo que va de legislatura, y ya se ha superado el ecuador de la misma, el PSE reclamó al PNV que «ponga fin a su estrategia de dejar gobernar a Bildu» y articule una alternativa que pasaría obligatoriamente por un pacto a tres de ambos partidos más el PP.

«La paralización de las plantas de tratamiento previstas por el Consorcio de Residuos y recogidas en la Norma Foral vigente del PIGRUG nos lleva al colapso y Bildu no tiene un plan alternativo para tratar las 260.000 toneladas de residuo no reciclable y no recuperable que generamos en este Territorio y que supone entre un 25% y un 30% de la basura», aseveró en una nota el secretario general del PSE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola.

«Cortina de humo»

Para la formación jeltzale, la paralización de la incineradora es «una cortina de humo» para «ocultar la quiebra a la que Bildu ha llevado al Consorcio de Residuos».

El Gipuzku Buru Batzar (GBB) insistió en que la planta de maduración de escorias «estaba en espera de la regulación» y que «hay tiempo más que suficiente entre el inicio de la construcción de las otras plantas de tratamiento y la de la planta en cuestión, una planta que no ha salido a licitación». Añadió además que «nunca se ha previsto» la construcción de una planta para tratar las cenizas.