La entidad blanquiazul ya ha ingresado la cantidad del traspaso
El club niega que llegara a un acuerdo para vender a Illarra
El de Mutriku fue presentado ayer, acompañado de una treintena de amigos.
GARA | DONOSTIA
Al tiempo que ayer el presidente madridista Florentino Pérez agradecía «a un club amigo como la Real su disposición para que este momento sea posible», desde el club donostiarra se negaba a este periódico que hubiera habido acuerdo alguno con el Real Madrid para el traspaso de Asier Illarramendi al conjunto blanco. De hecho, esas fuentes desvelaron que el club ya ha ingresado toda la cantidad estipulada y de una sola vez, y no a plazos como hubiera preferido la entidad madrileña.
El pago del correspondiente IVA de la operación, 6.759.900 euros que ingresará la Hacienda
guipuzcoana, y que fuera el propio Madrid y no el jugador quien depositara el dinero de la cláusula en la Liga Profesional, fueron los argumentos que avalaron esa hipótesis del acuerdo, si bien desde la entidad de Anoeta insisten en que esta es una fórmula que permite la LFP, utilizada en casi todos fichajes en los que se ejerce esta posibilidad. El pago del IVA y la emisión de la correspondiente factura obedecerían a obligaciones tributarias. Por tanto, los responsables realistas quieren dejar claro que el club blanquiazual nunca ha pactado con el nuevo equipo de su ya exjugador Asier Illarramendi.
Sea como fuere, lo cierto es que la Real tiene ya 30 millones en caja y el Madrid a su nuevo jugador, presentado ayer en el coliseo blanco. Una presentación ajena al glamour habitual de los fichajes madridistas, al protocolo, y es que Asier estuvo acompañado de una treintena de amigos llegados desde Mutriku que pusieron la nota colorista y nada formalista al acto.
«La verdad es que se organizaron para venir aquí. Ellos también están `flipando' por la dimensión de todo esto, que venimos todos de un pueblo de 5.000 habitantes», reconoció el futbolista. «Mi vida cambiará bastante, vengo de un pueblo de 5.000 habitantes y está claro que cambiará. Pero yo no cambiaré», prometió el jugador guipuzcoano, al que aguarda un futuro tan prometedor a la par que incierto. Nervioso como él mismo reconoció, Illarra, nombre que llevará junto al número `24' del Madrid, prometió «que con humildad y trabajo intentare hacerme un huequillo en el once, aunque será difícil».
Illarramendi agradeció en repetidas ocasiones el esfuerzo de la directiva blanca por traerle al equipo madrileño, una gratitud que dirigió especialmente al presidente Florentino Pérez. «El club siempre me ha mostrado su cariño, en especial el presidente, al que desde aquí le agradezco su confianza y esfuerzo. Ahora me toca trabajar duro, el lunes empezamos y estoy con ganas», reconoció.
Sobre su marcha de la Real, «la decisión para mí no fue sencilla, en la Real pasé muchos momentos bonitos. He pasado allí 12 años, desde niño. Se lo agradezco a la Real y a la afición realista por todo el cariño», aseguró el centrocampista, que prometió «darlo todo» por el escudo del Real Madrid.
El presidente blanco se refirió al jugador en el sentido de que «procedes de una tierra de grandes jugadores y tradición que los que amamos el deporte respetamos».
Tan sólo doce días han pasado desde que comenzara la renovación de abonos y la Real ya ha alcanzado los 25.682 socios. A lo largo de esta última semana, un total de 201 aficionados se han dado de alta como abonados del club txuri urdin, mientras la primera plantilla afrontará su tercera semana de trabajo en Zubieta con las miradas puestas en el amistoso en favor del Kilometroak del próximo sábado ante el Toulouse -que se jugará en Beasain-. Tras el amistoso en Arrasate, el equipo no volverá a las andadas hasta mañana, en doble sesión. Mañana también se presenta ya el Sanse, a partir de las 10.30, con el primer amistoso el 27 ante el Pasaia. GARA