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Sábado festivo en el BBK Live

El cielo de la tarde bilbaina tornó gris ceniza espesa sobre las 16.00 horas. Humedad, cien por cien. Bajo esta bóveda el Bilbao BBK Live ruega que nada caiga del cielo y la líe como ayer o aún de manera más cruel. Por fortuna, pasa la tarde y todo se mantiene inalterable hasta el cierre de esta crónica con un vital Muguruza sobre el escenario.

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Pablo CABEZA

A las 17.00 horas la noticia del BBK live se encuentra en la extensa cola de aficionados que ya espera la apertura de puertas. No es habitual que la gente se acerque tan pronto, pero está claro que la visita de Green Day ha motivado a miles de seguidores. LLegada la hora de apertura, 18.00, la actualidad se llama: carrera 500 metros lisos, ya que la mayoría de la gente que entra, chicas principalmente, corren ansiosas su otro Sanfermin para ocupar las primeras filas del escenario Bilbao, donde a las 22.35 saldrá Green Day. Se van a pasar en ese terreno conquistado, aunque cautivas, más de cuatro horas. Pero según nos comentan ellas y ellos: «Por Green Day lo que haga falta».

El beneficiado del asunto es Jamien N Commons, un desconocido músico de Bristol, con menos pompa e historial que Toy o Spector, abrieron jueves y viernes, pero de mayor empaque y categoría musical. Abajo tiene a una mayoría «grindeiriana», pero le aceptan con entusiasmo su propuesta de soul y blues de la ciudad donde creció, Chicago. Se le compara con Nick Cave o Tom Waits. En «The preacher» es sencillo descubrir a un austero Cave, en «Rumble and sway» cabe intuir algo de Waits, pero es mínimo. Las dos canciones formaron parte de lo mejor de su show, que mostró a un veinteañero con voz de hombre y cultura de veterano. Su retrosonido resultó sugerente, musical, muy roots y caliente.

En el escenario Live se la juegan los barceloneses Syberia, quienes presentan «Drawing a future». Vacían postrock con toques metal. Monótonos, previsibles y aburridos casi nos expulsan del escenario Live a pesar de ser buenos y experimentados músicos.

En Heineken han dado las 19.00. A escena sube White Denim un grupo de difícil escucha a la primera ya que no apuestan por un género claro ni por canciones de estribillos quedones o ritmos marcados. Su ambición les trocea por el espacio de estilos como el pop no convencional, el rock con rayas de sicodelia, el indie rock que todo lo acoge, el neofolk o incluso la experimentación. «Gas on f» es uno de esos sueños sutiles que firman o «Handwriting», más saltarina y folk, poco enlazada con el título anterior. Con «It's him» demuestran incluso que el garage rock también es parte de su ambigua, pero recia personalidad.

De Suecia a Euskal Herria

The Hive es una banda que lleva justo dos décadas asolando los escenarios con su potente sonido rockero. El quinteto ha pasado en variadas ocasiones por Euskal Herria.Con su facilidad para el rock mezclado con las melodías, algo innato a las bandas escandinavas, sueca en esta ocasión, su set fue lo de siempre: rock and roll garagero con ese punto punk tan excitante, por lo que con ellos llegó la marcha y el apogeo al escenario Bilbao, donde los seguidores pudieron quitarse la pereza, inyectarse vía neurona una buena dosis de optimismo rítmico muy superior a «Lex hives», su álbum del año pasado y que nos dejó una irregular resaca de pensamientos. The Hive apareció en escena poco menos que de mariachis. Se descamisaron después, dialogaron en castellano (bastante fluido) con el público y apareció levantar las manos de más de 15.000 asistentes. Su apuesta fue la de ser unas grandes estrellas del rock, paseíto de su cantante incluido por entre el público saludando como si hubiese ganado el Tour diez años.

En todo caso, una lástima que coincidieran en gran parte con los angelinos The Bots, también una propuesta rockera salvajota y muy dada a quitar humedades del cuerpo. Singular sin duda la propuesta del dúo liderado por Mikaiah, de 19 años, vocal y guitarra, y Anaiah, de 15, que se encarga de la batería. A pesar de la edad, han grabado ya «The booth», (2009), «Black and white lights» (2010), and «Ladies & gentlemen» (2011), repertorio que les permitió escoger para el presente BBK Live un poco de todo, punk vía Black Flag, Bad Brain o Circle Jerks.

Cerca de las 21.00 el escenario Heineken acogió la propuesta de Fermin Muguruza. Sobre su gira nos hemos referido en GARA en variadas ocasiones y desde diferentes países, poco resta que añadir. Con todos los músicos vestidos de negro y con Cuba reflejada en la camisa de Fermin van cayendo las canciones de «No More Tour 2013». El profundo sonido del bajo de Víctor se mezcla con la triki de Solano. Los vientos adornan y el ritmo, con el apoyo de dj Zigor, anima a los miles y miles de seguidores y curiosos que se han acercado. Suena denso, profundo, como debe llegar el buen dub. Se baila «Balazalak», «Newroz», ya con Sorkun en escena, «Dub Manifest», «Zuloak gara»... Es la palabra y la fiesta, y el tiempo para la noche.

 

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