Indignación en Confebask porque se debatirá sobre la negociación colectiva
Confebask mostró ayer su indignación y tachó de «inaudito» que el Parlamento de Gasteiz debata este jueves en la Diputación Permanente una proposición no de ley de EH Bildu que rechaza la reforma laboral y de la negociación colectiva, aprobada por el Gobierno del PP. Llama a buscar una salida a los convenios, sin que predomine la unilateralidad de la patronal, como ya está ocurriendo, y exige que se garantice el marco vasco de relaciones laborales.
Juanjo BASTERRA
La Junta de Portavoces del Parlamento de Gasteiz convoca para este jueves, 18 de julio, a la Diputación Permanente para debatir sobre la proposición no de ley formulada por EH Bildu «para hacer frente a la reforma laboral» y para el mantenimiento de la negociación colectiva como antes del pasado 7 de julio, cuando decayó la ultraactividad, entre otras medidas, producto de la reforma laboral aprobada por el Gobierno del PP para favorecer solo a los empresarios. También reclama que haga «acuerdos multilaterales» como se lo pide la «mayoría política, social y sindical de este país». A la vez, EH Bildu solicita mantener el marco de negociación colectiva en Euskal Herria.
Nada más conocerse el visto bueno a la tramitación de la propuesta de EH Bildu, Confebask mostró su indignación con la propuesta «vía urgente». Según expuso en una nota «resulta inaudito que la Cámara estudie una propuesta que plantea incumplir la ley y reprobar a quien la respeta».
La patronal vasca se pregunta «cómo es posible que en una de las instituciones que en cualquier país ha de ser la principal valedora y garante de la Ley se plantee un debate sobre la posibilidad de incumplir las disposiciones legalmente aprobadas o sobre la reprobación de quienes responsablemente las respetan, tergiversándose además la realidad para justificarlo».
El pasado 5 de julio se truncaron todas las esperanzas que los sindicatos LAB, CCOO y UGT depositaron para encontrar un acuerdo en el CRL para mantener la ultraactividad y evitar la capacidad que tienen los empresarios de inaplicar convenios cuando aduzcan que sus empresas están en crisis. Un día antes, Confebask dio otro portazo al lehendakari Urkullu. Las centrales sindicales denunciaron que «una élite económica minoritaria se puso por encima del Gobierno y la sociedad vasca»
El 85 % de los 125 convenios sectoriales e intersectoriales que había en la CAV antes del 7 de julio ha perdido su vigencia según lo que establece la reforma laboral del Gobierno del PP en materia de negociación colectiva, según UGT Euskadi. Raúl Arza, secretario general de la central, y Maribel Ballesteros, dijeron que «solo mantienen su vigencia 19 pactos sectoriales». En Araba, se mantienen 6 de los 21 convenios sectoriales existentes, que protegen las condiciones laborales de 12.970 trabajadores; 9 de 48 en Gipuzkoa, que afectan a 6.565 empleados, y 4 de 48 en Bizkaia, que atañen a 38.061 contratados. En la primera semana de aplicación se ha prorrogado la vigencia de 8 convenios colectivos
Para Arza, «estas cifras ponen en evidencia lo que ya intuíamos antes de su entrada en vigor, que quienes van a pagar las consecuencias de la reforma laboral van a ser los contratados a partir del 8 de julio».
Criticó a las patronales vascas de haber hecho decaer los convenios sectoriales, ya que, en su opinión, «la ley no impide que se negocie su ultraactividad». El secretario general acusó los miembros Confebask por «ser alumnos aventajados de la reforma laboral». J.B.
Tras la «amenaza y chantaje» de la dirección de Gerdau Basauri de expulsar a los trabajadores que mantuvieran la huelga en protesta por la imposición de las condiciones laborales y salariales, los trabajadores acordaron realizar «un alto en el camino», según LAB, pero que no ha solucionado el «grave conflicto» que se vive en la planta. De hecho, LAB asegura que «una vez visto el talante real de la empresa y la actitud de UGT y USO continuar con la defensa de las condiciones laborales y el empleo en la planta de Basauri». La central sostiene que «todos los escenarios están abiertos».
Los afiliados de CCOO votarán hoy si se suman a la firma del convenio, que obliga a trabajar más horas y a garantizar el salario por medio de distintas fórmulas de productividad. ELA denunció ayer mismo «las amenazas públicas» de la dirección y «la fuerte escolta policial» en la empresa, y tachó de «traición» la firma del convenio por UGT y USO.
CCOO afirmó que la convocatoria de huelga de esta semana no tenía el respaldo de la asamblea y UGT destacó que, tras la firma del acuerdo con la empresa, «ya no hay motivo para más convocatorias». J.B.