Trece municipios de Gipuzkoa pondrán en marcha en los próximos meses iniciativas por la convivencia, siguiendo el camino abierto por el Consistorio de Errenteria el pasado 24 de enero con un acto de reconciliación y homenaje a todas las víctimas del conflicto.

La directora de Derechos Humanos y Memoria Histórica de la Diputación guipuzcoana, Marina Bidasoro, fue la encargada de presentar ayer en rueda de prensa estas nuevas iniciativas. Según explicó, «durante muchos años, la violencia, la exclusión y la vulneración de los derechos humanos han influido de forma notable en la convivencia diaria de los municipios. Las relaciones personales, las relaciones sociales se han visto afectadas y ha llegado el momento de escucharnos y reconocernos mutuamente, y de crear el clima de confianza que impulsará la convivencia. Para construir la convivencia del futuro».

Municipios de Bildu, PNV y PSE

Siguiendo esos principios, el pasado 23 de abril finalizó el plazo para presentar los distintos proyectos; después de analizar todas las solicitudes remitidas, la Diputación apoyará los proyectos de trece municipios, entre los que hay consistorios gobernados por Bildu, PNV y PSE. Concretamente son Getaria, Tolosa, Orio, Donostia, Urnieta, Azpeitia, Lasarte, Andoain, Elgoibar, Zarautz, Hondarribia, Irun y Errenteria.

Bidasoro explicó que se ha creado un grupo asesor para llevar adelante estas iniciativas, que en este momento está compuesto por Lokarri, Baketik y Bakeola, si bien «está abierto a que en el futuro se sumen otras asociaciones y agentes». Este grupo asesor trabajará directamente con los ayuntamientos y realizará la valoración y seguimiento de los proyectos junto con la Dirección Foral de Derechos Humanos y Memoria Histórica.

Ya el año pasado, varias fueron las localidades que pusieron en marcha iniciativas similares, siendo la de Errenteria, denominada Eraikiz, la que mayor repercusión pública tuvo al reunir a «víctimas, agentes y asociaciones de distinta ideología, color y condición», como Iñigo Manrique (PP) o el que fuera alcalde de la localidad Miguel Buen (PSE), que mostraron su apoyo a los concejales del municipio.

Aquella cita dejó imágenes inéditas, como el saludo del actual alcalde, Julen Mendoza (Bildu), a la viuda de José Luis Caso, concejal del PP muerto por ETA en 1997. En la sala se reunieron también expresos, familiares y torturados. Mendoza expuso en el discurso de aquel día las líneas maestras de estas nuevas iniciativas, abogando por la necesidad de «sacudirse los miedos» por ambas partes y por «aprender a hablar, a escuchar, a empatizar».