UDATE
Dany Boon se hace querer en la comedia romántica «Llévame a la luna»
M.I. | DONOSTIA
Si te reíste con Dany Boon en «Bienvenidos al Norte», volverás a hacerlo en «Un plan parfait», retitulada para su distribución como «Llévame a la luna». En esta ocasión se hace querer con la caricatura de un solitario escritor de guías turísticas, al que se le pasa la vida viajando sin tener una verdadera relación. Es el perfecto nerd, que no se entera de nada porque sólo piensa en sí mismo, con lo que su aspecto despistado le convierte en objeto de todas las bromas cómicas imaginables.
He leído en algún sitio que no hay quien se crea que un tipo así pueda enamorar a una belleza rubia como Diane Kruger, pero cuidado, porque los nerds están de moda y triunfan en la televisión -un ejemplo son los chicos de «Big Bang Theory»-. Más fácil será, por tanto, que funcionen de forma similar en la ficción cinematográfica, y con mayor razón en una tontorrona comedia romántica.
Sobre la química o no química de la pareja, todo me parece opinable. Sin ser actriz cómica, Diane Kruger hace un considerable esfuerzo por ganarse al público, consiguiéndolo definitivamente in extremis, cuando al final baila el kasachov imitando al propio Danny Boon, que ya se había pegado antes unas coreografías desternillantes.
La protagonista debe romper un maleficio que pesa sobre su familia, según el cual la primera boda siempre termina en divorcio. Para ello debe buscar un incauto con el que casarse y separarse a la vez, quedando libre para un segundo matrimonio con su verdadero amor. No tendrá más remedio que seguir al guía por Africa y por Rusia, jugándose el tipo.