Etxerat informó el martes de que el preso de Ondarroa Xabier Aranburu, que se encuentra en la prisión de Lyon-Corbas, siente dolores en su brazo izquierdo desde hace tres meses. El médico de la prisión le observó y le dijo que podría tener problemas de corazón, por lo que lo mejor sería que lo llevaran al hospital a hacerle unas pruebas.

En una nota, la asociación de familiares agregó que Aranburu ha tenido que realizar varias peticiones en estos tres meses al director de la prisión hasta que el domingo, 21 de julio, lo trasladaron al hospital. «Pero, incluso estando ya en el centro de salud, le realizaron solo una prueba de las dos que le deberían haber realizado y lo volvieron a llevar a la prisión».

Ante esta situación, los familiares y amigos han comenzado un envío masivo de cartas al director de la prisión de Lyon- Corbas, solicitando que lleven a Aranburu a realizarle todas las pruebas que necesita.

«Desgraciadamente, últimamente hemos tenido varios casos en los que se repite la desasistencia médica en prisión. Nuestros familiares y amigos desarrollan varias enfermedades en la cárcel, pero en allí no reciben una adecuada asistencia médica», subrayaron. Por ello, exigen que se respete el derecho a la salud de sus allegados.

Junto al Consulado británico

Por otra parte, en Bilbo se movilizaron 100 personas por los derechos de los presos el martes y 13 en Sarriguren. En Errotxapea se concentraron ayer 31 ciudadanas y ciudadanos, y en Santurtzi fueron 42.

Mañana, último viernes de mes, se realizarán las habituales movilizaciones en todo el país. Además de los actos de la tarde, Herrira ha convocado una iniciativa especial en Bilbo. A las 12.00, junto al Consulado británico, remarcarán el derecho que asiste a las y los exiliados políticos a vivir con dignidad y solicitarán el final de la persecución y las medidas de excepción que se les aplican. El portavoz de Herrira Ibon Meñika efectuará declaraciones ante los medios y luego recorrerán el camino que une el Consulado británico con el Consulado francés.