Quinta semana de pretemporada
Pardo, «tranquilo» ante el cometido de suplir a Illarra
El riojano lo tiene claro: «Yo no me considero el relevo de Asier ni de ningún jugador que se vaya. Estoy trabajando para intentar jugar todos los minutos posibles y hacerlo lo mejor posible para ayudar al club».
Imanol CARRILLO
A sus 20 años -cumple 21 el próximo 22 de octubre-, Rubén Pardo tiene un futuro prometedor. Las personas que le conocen y le rodean lo saben. Incluso los aficionados blanquiazules lo pidieron sobre el césped en más de un encuentro de la temporada pasada. Pero el jugador riojano se lo toma todo con tranquilidad y con los pies en el suelo.
Con la marcha de Asier Illarramendi al Real Madrid, quedan olvidados los rumores del verano pasado que apuntaban a que el club blanco estaría interesado en los servicios de Pardo. Muchos consideran al joven futbolista riojano el sucesor natural del guipuzcoano, pero él tiene las cosas muy claras: «Yo no me considero el relevo de Asier ni de ningún jugador que se vaya. Estoy trabajando para intentar jugar todos los minutos posibles, soy joven, e intentaré hacerlo lo mejor posible para ayudar al club, a la Real».
Así las cosas, el centrocampista reconoció sentirse «tranquilo» y estar «trabajando día a día para que Jagoba confíe en mí lo máximo posible en las tres competiciones e intentaré responderle con lo máximo».
De hecho, el futbolista de Rincón de Soto guarda la experiencia no tan positiva de la temporada pasada, en la que «no tuve las oportunidades que yo hubiera querido». Ello lo achacó a que «era cosa de Philippe (Montanier)», aunque seguido recalcó que «este es un nuevo año».
Tanto, que ve diferencias notables con el cambio de técnico: «Jagoba (Arrasate) me explica los movimientos que tengo que hacer en el centro del campo y me enseña los movimientos que hace un medio centro. Estoy muy satisfecho de que me ayude y me enseñe los errores que hago en los partidos de pretemporada que hemos jugado».
Con ganas de que ruede el balón
El sábado en Lisboa Pardo jugó 66 minutos en un encuentro que la Real perdió 2-0 aunque dejó un buen sabor de boca. «Ya lo dijo el míster, que ahora en pretemporada no hay que mirar los resultados, hay que mirar cómo jugamos y cómo evoluciona el equipo día a día. Nos dijo que estuviésemos tranquilos, que la semana había sido dura, pero hay que seguir trabajando», explicó el riojano.
Por último, indicó que «veo a la plantilla muy mentalizada. Es un año muy importante y muy bonito para jugar y está con muchas ganas de que el balón empiece a rodar en un partido oficial para hacer un buen papel y agradar a la afición».
La Real comenzó ayer una nueva semana de trabajo pensando ya en el stage de Inglaterra que realizará desde el viernes por la tarde. En la sesión matutina, Carlos Martínez se unió al trabajo grupal después de varias semanas ejercitándose en solitario. También lo hizo Ion Ansotegi, mientras que Xabi Prieto y Markel hicieron trabajo personalizado. En el caso del capitán, lo hizo tanto dentro de las instalaciones como sobre el césped. Por la tarde, no participaron Carlos Vela, por culpa de una torsión del tobillo derecho, y el jugador del Sanse Marco Sangalli, a causa de unas molestias en la planta del pie izquierdo.
La plantilla txuriurdin afronta una nueva semana cargada de trabajo, ya que ayer realizó doble sesión, hoy se ejercitará a las 10.00 y mañana afronta un doble reto: entrenamiento matutino a las 11.00 y un nuevo amistoso frente al Eibar, en el campo Asti de Zarautz, a partir de las 19.00.
Ya el viernes, los jugadores entrenarán a las 10.00, almorzarán en Zubieta y por la tarde viajarán a Inglaterra para realizar la última parte de la pretemporada. El sábado volverán a competir, contra el equipo de Reservas del Tottenham. Será el primero de los tres partidos del stage inglés. I. CARRILLO