Nagore BELASTEGI

Aunque en Euskal Herria cada vez más gente se defina agnóstica, o atea, que tire la primera piedra quien nunca haya tenido un amuleto de buena suerte, por si acaso, porque nos lo han regalado o porque es bonito. Y si no que se lo digan a todos esos estudiantes que al visitar Salamanca se han llevado consigo una ranita, por si acaso, ya que se supone que atraen los aprobados. Claro está que las ranas no pasan de ser meras figuritas decorativas si el portador no se prepara para el examen. La actitud es clara: si creemos en algo funcionará, y si no funciona ¿qué mal nos hace? El pensamiento positivo es indispensable para que los amuletos funcionen, y eso es lo primero que se aprende al acudir al Salón Internacional del Esoterismo y de las Terapias Naturales de Donostia, que se celebra desde ayer hasta el 11 de agosto en el Palacio Miramar.

La inauguración de la XX edición de la feria ya auguraba que el ambiente que encontraríamos estaría cargado de energía positiva. La escuela de Tai-Chi Kimusubi realizó una exhibición al ritmo de la música compuesta por Paula Olaz, después de que la solista Lourdes Moratinos cantara a la paz interior. Todos los presenten pusieron sus manos sobre el vientre y respiraron, tal y como Moratinos indicó, para anclarse a la tierra, para ponerse en contacto con ella. Tras el acto inaugural la gente se apresuró a huir del calor sofocante para entrar en el palacio y empezar a mirar los puestos repartidos por las salas, aunque la zona más concurrida fue la destinada a los lectores de tarot y otras artes adivinatorias.

Quienes no tengan mayor interés en saber cuál será su futuro pueden dejarse llevar por los consejos de quienes atienden detrás de los mostradores, y seguro que no dejan de sorprenderse. A simple vista llama la atención un aparato de metal llamado Esencial Emo que sirve para activar el agua y energecitar los alimentos. «El ser humano está compuesto por agua en gran parte y por eso es necesario reestructurarla, para que todos los órganos funcionen correctamente», nos contó Assumpta Civit, una de las responsables del puesto. Según ella, uno de los factores que empeoran nuestra salud son ciertas nuevas tecnologías como el wifi, ya que sus ondas penetran en nuestra piel y desestructuran el agua de nuestro interior.

El puesto de al lado, el que promueve la artesanía energética de la orgonita, sigue los mismos principios. Su responsable Francisco Capacete nos contó que cada vez tenemos más ondas nocivas a nuestro al rededor aunque no las notemos. «Yo ya no utilizo el wifi en casa, y aunque ya no la necesite, tengo una pieza de orgonita en casa», señala. Las piezas de orgonita son figuras que, además de ser estéticamente bonitas, están compuestas por materia orgánica (cuarzos y derivados) e inorgánica (metales) colocados dentro de formas de resina.

Hay quien acude a la feria con un objetivo fijo, y otros que se dejan guiar por la curiosidad. Estos seguramente terminen llevandose a casa un amuleto, pero hay tantos... ¡y tan bonitos! Las ventas más populares son las de los minerales, por doble motivo. Las piedras tienen energía y nos la trasmiten (está científicamente probado que las piedras emiten una determinada vibración, como todos los cuerpos del planeta), y además podemos llevarlas como elemento decorativo. Las más conocidas son la amatista, que favorecen el trabajo y la resolución de proyectos; la ágata, que es tranquilizante; el cuarzo cristal, que sirve para potenciar la concentración; la turquenita, con ese color tan impresionante, trasmite felicidad y serenidad; el granate, da vitalidad; y el ojo de tigre, que atrae el dinero.

Sin embargo, no solo las piedras que compremos servirán como amuleto. Como hemos dicho, lo más importante es la actitud positiva, tal y como nos explicó la druida y vidente Carmen Navarrete: «Vas por la calle y dices `uy, que piedra más bonita', pues la lavas y te la llevas a casa, y la guardas junto con otras piedras que encuentres y te gusten. Eso que sentiste al encontrarla se quedará guardado en ella, y esa alegría se trasmitirá a la casa», explicó. De todas formas, siempre es más efectiva un mineral como un cuarzo, ya que con uno solo se expande su energía por toda la casa.

Los videntes como Navarrete ayudan a la gente a conseguir sus metas, pero no a base de magia. «El simple hecho de que venga alguien a contarme que tiene un proyecto ya es un paso, porque le predispone a conseguirlo, tiene esa actitud», afirma. De este modo, desde su punto de vista, los videntes son quienes les darán ese empujón que les falta a los consultantes, y en caso de necesitarlo, les darán consejos para ser más felices. «No puedes salir a buscar trabajo, por ejemplo, si tienes depresión. Es mejor que te quedes en casa un par de días descansando, y cuando se esté mejor salir, pensando en positivo».

Navarrete explicó cómo realizar un ritual muy sencillo: necesitamos una vela artesanal, un papel de seda de un color relacionado con lo que queramos pedir o solucionar -rojo para el amor, por ejemplo-, una rosa roja, un vaso de agua transparente y un espejo. Escribiremos en el papel los deseos que tengamos y después desenrollaremos la vela, para introducir dentro el papel. La encenderemos frente al espejo, junto a la rosa y el agua, y esperaremos a que se consuma.

Otros puestos populares de la feria son los de aromaterapia, que cuentan con decenas de aromas de inciensos para perfumar la casa como más nos guste, o los que disponen de aparatos para conocer el color de nuestra aura (el halo que, se supone, rodea a cada persona). Los colores coinciden con los de los siete chakras y nos muestran cuáles de ellos están más desarrollados.

Quien prefiera no complicarse demasiado siempre puede acudir a los puestos de amuletos en general, ya que venden pequeños objetos para todas las necesidades. Así, desde la caseta de Conchi Lastra precisan que quienes reclaman dinero deben llevar en su cartera las monedas de la suerte o polvo de oro. «Es polvo de oro de verdad, no purpurina, como creen muchos», subrayan con una sonrisa. A la vez que las mencionadas ranitas de la sabiduría para los estudiantes, los buhos son muy demandados por quienes están a punto de presentarse a un examen. Para el amor, en cambio, lo más indicado es hacerse con un cuarzo rosa (preferiblemente elegido por el propio interesado) y tenerlo en casa.

Otro de las joyas-amuletos de más éxito son los llamadores de ángeles. Según el esoterismo las embarazadas deben recibirlos como regalo, y llevarlos colgando del cuello, a la altura de la tripa con un cordón largo+, hasta que nazca el bebe. Nadie más deberá tocar el amuleto (en ese caso deberá lavarlo con agua y cargarlo con la luz del sol o de la luna llena), y así, cada vez que la madre o el bebe necesite ayuda, bastará que lo agiten para que su «ángel de la guarda» acuda...

Esta planta de origen africano es ya muy común en nuestras casas porque apenas necesita cuidados y es muy útil. Sus propiedades actúan a nivel interno o externo, aunque si lo vamos a ingerir es mejor que recurramos a los zumos ya preparados para evitar que nos siente mal. En el salón podemos encontrar desde bebidas hasta cremas de masaje, desodorantes, cacaos para los labios que además sirven para aliviar las picaduras de insectos... y como no, el popular gel de aloe vera 100% puro, que alivia la piel enrojecida por el sol y las quemaduras caseras como las causadas por las salpicaduras de aceite, y también se usa como mascarilla facial.

Lo más cómodo es refrescarse con el gel ya preparado, pero si tenemos una planta en casa podemos hacerlo nosotros mismos. Hay que elegir una penca madura de la planta, de la parte baja y exterior, y arrancarla con cuidado. Se le quitan las espinas laterales y se deja en remojo hacia abajo para que salga la gelatina. Pasados cinco minutos se lava y se retira el resto de la piel. Los trozos de gel obtenidos los podemos batir con la batidora y al líquido le añadiremos unas gotas de limón para que no se oxide.La mezcla la guardaremos en el frigorífico o congelador, y la usaremos cuando queramos. Para una emergencia, aplicar el gel sobre la piel.