El PSN frena la investigación pública de los pagos de Bárcenas en Nafarroa
El PSN sumó ayer sus votos a PP y UPN para evitar que hoy se vote la creación de una comisión de investigación sobre la parte del «caso Bárcenas» que afecta a políticos navarros, como Jaime Ignacio del Burgo o Calixto Ayesa. Al perderse la tramitación de urgencia, la Cámara tendrá que debatir sobre esta comisión en setiembre, cuando se reinicie el curso político. El PSN no es capaz de adelantar cuál será su postura, aunque asume que la decisión final la tomará Ferraz.
Aritz INTXUSTA | IRUÑEA
El Parlamento perdió ayer la oportunidad de debatir en su sesión de hoy la creación de una comisión de investigación sobre la trama navarra del «caso Bárcenas». La propuesta que trajeron Aralar-NaBai y Bildu era más abierta y abarcaba, conscientemente, otros sobresueldos de políticos como las dietas de Caja Navarra. Vista la imposibilidad de sacar adelante el texto amplio, los impulsores decidieron limarlo hasta centrar la investigación a los sobresueldos que pagó Luis Bárcenas a políticos navarros. Pero no hubo manera: el PSN se volvió a alinear con PP y UPN y la moción no podrá votarse en la sesión extraordinaria de hoy. Por otro lado, los argumentos de Bildu y Aralar sí que convencieron a I-E.
A través tanto del «caso Bárcenas» como de la investigación del «caso Cervera» se tiene constatación de que varios dirigentes del PP en Nafarroa (hasta hace unos años mezclados casi de forma indistinguible con sus socios de UPN) han recibido sobresueldos. Algunos de ellos están anotados dentro de la contabilidad B del extesorero de Génova. Los destinatarios que han confirmado haber recibido sobresueldos son Calixto Ayesa, Jaime Ignacio del Burgo, Elena Murillo y Santiago Cervera. El caso de Cervera no ha sido vinculado a las cuentas que manejaba el extesorero.
Por su parte, el parlamentario del PP Eloy Villanueva asumió estar al corriente, al menos, de los pagos a Cervera. Unos sobresueldos que la gerente del partido, Amelia Guibert, entregaba en metálico a una entidad bancaria de la calle Txapitela mensualmente. Villanueva se mostró contrario a la apertura de esta comisión de investigación, puesto que Del Burgo, Murillo y Ayesa «ya han dado oportunas explicaciones en sede judicial». Villanueva no aclaró si él da por buenas estas declaraciones, dado que Del Burgo apuntó que José María Aznar estaba al corriente de ese manejo de dinero.
Para Villanueva, las cuentas del PP están «absolutamente claras». El parlamentario y líder en la sombra del PP navarro sostiene que lo que se pretende es «añadir confusión al panorama político».
El PSN decidió retrasar a setiembre la votación de esa comisión de investigación lanzando mensajes vagos. Juan José Lizarbe asegura que lo prioritario para el PSOE es que la investigación sobre el «caso Bárcenas» se abra en Madrid. Por otro lado, a los dirigentes del PSN en Nafarroa les cuesta disimular que su incomodidad está vinculada a la comisión de investigación sobre Caja Navarra que echaron por tierra hasta en tres ocasiones. Lizarbe tumbó los motivos de la urgencia de la votación (lo que equivale a retrasar el debate hasta que se reabra el curso parlamentario en setiembre) alegando que «más allá de la intención correcta, lo importante es que tenga efectividad en el Congreso de los Diputados».
José Miguel Nuin, de I-E, utilizó elementos parecidos, pero para llegar justo a la conclusión contraria. Nuin se mostró favorable a que la moción se centrara específicamente en los sobresueldos del PP. Aunque opina que el «ámbito natural» de la comisión es el Congreso, le parece oportuno abrir una comisión en Iruñea en aras a comprobar si, realmente, existe una trama navarra dentro de la presunta contabilidad irregular del Partido Popular.
Bakartxo Ruiz, de Bildu, no se mostró tan timorata. A juicio de Ruiz, está bien claro que esa rama navarra existe. Las reiteradas ocasiones en las que aparece la inscripción «Jaime I.» en los «papeles de Bárcenas», la asunción de los cobros por parte del resto y los sobresueldos conocidos a raíz del caso Cervera -que Génova reconoció, pero ofreciendo explicaciones contradictorias- son prueba de que en Nafarroa fluía parte de ese dinero descontrolado. Para Bildu, el PSN ha echado por tierra la posibilidad de que el Parlamento de Nafarroa se pusiera a la cabeza para esclarecer lo ocurrido dentro del PP a nivel estatal.
Asimismo, Patxi Zabaleta (Aralar-NaBai) insistió en la oportunidad perdida. A su juicio, una comisión de investigación en Nafarroa habría sentado un «precedente» muy positivo para forzar al Congreso a poner luz y taquígrafos sobre lo ocurrido. Zabaleta, además, fue muy claro a la hora de reclamar que esa transparencia debe llegar también a Caja Navarra, insistiendo en que su grupo no piensa cejar en el empeño de abrir esa comisión de investigación sobre CAN. También habló abiertamente de que se avinieron a acotar el contenido de la propuesta de cara a recibir más apoyo centrándose solo en lo ocurrido dentro del PP.
En cuanto a UPN, Carlos García Adanero volvió a los mismos argumentos que empleó para dar el portazo a la investigación de CAN. En su opinión, la comisión solo busca «sacar tajada política» de la corrupción y prefiere que el caso acabe en manos «de los tribunales de Justicia, que son objetivos».
Aplazar un debate inevitable
Con su decisión de retrasar el debate, el PSN solo ha conseguido ganar tiempo. Ayer no se atrevió a adelantar cuál será su postura a la hora de votar si se abre la comisión o no. Roberto Jiménez, fuera de los micrófonos, reconoce que la decisión recaerá en manos de Ferraz. A la filial navarra del PSOE no le gusta esta comisión, porque les deja en un lugar incómodo. Sin embargo, el líder estatal, Alfredo Pérez-Rubalcaba, puede tener otros planes.
Tras el debate en el que Mariano Rajoy se defendió en el Congreso, Del Burgo atacó públicamente a Rubalcaba, acusándole de mentiroso en cuantos medios pudo, porque Rubalcaba le ubicó entre los receptores de dinero negro. El abogado y expresidente navarro niega la mayor, agarrándose a unas explicaciones un tanto endebles, como el recibí escrito a mano alzada en un folio que firmó Murillo y que él atesoró durante una década. También justifica los pagos a Ayesa, porque el médico supuestamente perdía dinero por dejar su consulta al entrar en política. También se ha excusado en que había que compensar a quienes habían sufragado un préstamo de la UCD. Esta última afirmación resulta incierta. No se puede vincular el dinero que entregaba el PP con los que asumieron la responsabilidad de ese crédito, porque esos fondos no llegaron a todos los que pagaron durante años.
Por otro lado, Del Burgo hacía las veces de intermediario y siempre trataba con sobres de dinero en metálico. Nunca con transferencias bancarias. El abogado que con tanto celo redactó el recibí para la entrega a Murillo y lo custodió durante años, aseguró ante el juez que jamás se preguntó de dónde procedía el dinero. En lugar de ello, casi se lo tomaba a broma, a tenor de lo que contó al juez Ayesa. El exconsejero de Salud navarro confesó al juez que Del Burgo solía entregarle el sobre con los billetes diciendo: «Calixto, vengo con el dinerillo».
En setiembre, el PSN tendrá que plantearse de nuevo de qué lado está. Si Ferraz mantiene la línea de desmontar al PP a través de la financiación irregular que se desprende de los papeles de Bárcenas, el PSN tendrá que acompañar al resto de partidos de oposición en su intento de crear una comisión parlamentaria que lo investigue. Por de pronto, su decisión de dejar pasar la ocasión refleja la incomodidad que representa una comisión parlamentaria para ellos. Y, sobre todo, que pese a su discurso de las últimas semanas, Jiménez y los suyos no han soltado amarras con UPN y PP.
El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, salió ayer a la luz pública para alinearse dentro de la corriente negacionista del PP. En su opinión, Luis Bárcenas es un resentido que carga contra todos sus antiguos compañeros de partido. Maroto cree que, como no le han apoyado, el extesorero actúa desde el «resquemor» desde la cárcel. No obstante, las pruebas que presentó Luis Bárcenas sobre la presunta financiación irregular de la sede del PP en Bilbo no fueron escritos cuando el extesorero estaba preso, sino bastante antes.
«Cada vez que alguien sea acusado porque este señor dice que le han financiado, y se pone ya en tela de juicio, tiene que ser el inocente el que se tiene que defender de las acusaciones», aseguró Maroto a los micrófonos de «Radio Euskadi», negando de esta forma la presunción de inocencia a Bárcenas. «Es tan sencillo como decir `a este lo financié' sin pruebas», remató el alcalde gasteiztarra.
En su opinión, el PP vasco actuó con total transparencia desde el primer momento, enseñando los libros de contabilidad. Posteriormente, él confesó no haberlos leído. «No he visto el libro de contabilidad de esa sede, pero no me hace falta, porque lo han enseñado y todos los medios de comunicación lo han mirado hasta la última coma», aseguró.
Quien sí deberá mirar los libros de contabilidad es el juez Ruz, a quien Bárcenas entregó la carpeta verde con 164 folios que supuestamente acreditaría que la sede de Bilbo se pagó de forma fraudulenta. Se ha confirmado que dentro de esa carpeta hay documentación variada, como hojas de cuaderno manuscritas, un listado de movimientos económicos elaborado con un ordenador, una hoja de transmisión de fax, fotocopias de impresos bancarios del Banco Popular, impresos bancarios manuscritos del Banco de Vitoria, Argentaria, BBVA, Banesto y la liquidación de presupuesto de la sede supuestamente pagada con dinero negro. El portavoz del PP vasco, sostiene que todo eso es falso.
Se han conocido dos líneas de sobresueldos dentro del PP navarro. La primera aparece en los «papeles de Bárcenas» y tiene como figura clave a Del Burgo. La segunda surgió a raíz del «caso Cervera» y, además de Cervera, eran conscientes Villanueva y Amelia Guibert.
Rubalcaba citó a Del Burgo entre los perceptores de dinero negro de Luis Bárcenas. El político navarro le ha atacado duramente, porque asegura tener todos los recibís y no haberse quedado con un solo euro.