Hala Bedi celebró ayer su trigésimo cumpleaños en las Txosnas de Gasteiz. Una larga trayectoria destinada a pregonar en las ondas las acciones y el trabajo realizado por el tejido asociativo de la ciudad. Al fin y al cabo, la emisora se creó para «dar voz a los sin voz», tal como explicó Iñaki Ziarsolo, integrante de la radio más libre de Araba.

En declaraciones a GARA, Ziarsolo destacó la constante transformación de una emisora que mantiene la organización asamblearia y la autogestión como señas de identidad. Según explicó, el paso del tiempo ha supuesto un reto para los integrantes de Hala Bedi, que, con la ayuda de muchos halabelarris, han diseñado una programación de calidad para poder resistir en la frecuencia modulada.

De cara a los próximos meses, Ziarsolo apuntó un objetivo concreto: poner en marcha una nueva emisora en euskara. Un viejo sueño que puede convertirse en realidad antes de que finalice este año. Asimismo, en otoño saldrá a la venta un disco de versiones y un libro. Dos productos, a los que se sumará un documental, con los que celebrar y recordar los treinta años de la radio alavesa.

En cuanto a los actos celebrados ayer, cabe destacar la comida popular organizada en el campus universitario, a la que asistieron cerca de un centenar de personas, y el posterior «desfile musicateo o peregrinación librepensadora». Esta procesión finalizó a las diez de la noche en la txosna de Hala Bedi, donde tuvo lugar el brindis final.

Independentzia Eguna

Por otro lado, ayer muchos blusas y neskas dejaron a un lado los pañuelos a cuadros y rojos para anudarse al cuello el pañuelo verde de la red Independentistak, que ayer tomó las calles de Gasteiz para reclamar una soberanía plena para Euskal Herria. Txutxi Ariznabarreta, miembro de la citada red, destacó la buena acogida del tercer Independentzia Eguna, secundado por cientos de personas.

Ariznabarreta, que ayer participó en una kalejira independentista organizada por Gasteiz Kantuz, manifestó a GARA que la independencia es viable en Euskal Herria y subrayó que cada vez más personas ven que la independencia es la mejor opción para el futuro de los siete herrialdes vascos. La jornada independentista finalizó a las ocho de la tarde frente a la casa del Cordón, donde tuvo lugar un último poteo.