El alcalde de Bilbo regresó ayer a su domicilio tras salir del Hospital de Basurto, donde el 4 de julio fue operado para extirparle un riñón. Como informaron a Efe fuentes del centro médico, la dirección de Basurto no facilitó el parte médico de Iñaki Azkuna, que en febrero cumplió 70 años, ni el periodo de convalecencia que le restaría antes de volver a ejercer las funciones de alcalde. La citada agencia recordó que ya pasó por el quirófano el 6 de mayo para corregir problemas renales y secuelas de tratamientos médicos a los que se viene sometiendo desde se le diagnosticó un cáncer de próstata en 2003. Fue dado de alta el 28 de mayo, pero el 1 de junio regresó al hospital tras sentirse indispuesto.