La «simplificación» de varios trámites administrativos de carácter medioambiental que se exigen para poner en marcha ciertas actividades económicas reducirá en algunos sectores hasta en cuatro meses el plazo para iniciar su actividad.

Esta medida en la que trabaja el Gobierno de UPN fue detallada ayer por el consejero de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, José Javier Esparza, quien, como recogió la agencia Efe, aseguró que el principal objetivo es simplificar y rebajar la intensidad de la intervención administrativa en la puesta en marcha de determinadas actividades de carácter económico que, según dijo, tienen escasa incidencia en el medio ambiente.

Ese sería el caso de establecimientos residenciales públicos, almacenes, establecimientos de servicios situados en edificios, garajes de vehículos, talleres de reparación de superficie inferior a 1.000 metros cuadrados y otros pequeños talleres.

Una «declaración responsable» del promotor sustituirá tanto a la licencia municipal de actividad clasificada (cuyos plazos de concesión son de cuatro meses) como a la de apertura, con lo que la actividad podrá iniciarse en cuanto la presente.