El curso político ha comenzado y el Consejo de Gobierno de la Diputación de Gipuzkoa ya ha tomado su primera decisión importante: declarar la lesividad del contrato que el ente foral -gobernado por aquel entonces por el PNV- firmó con Bidelan en el año 2010. El equipo de Gobierno de Bildu prevé que, si se asume directamente el mantemimiento y conservación de la AP-1 y la AP-8, se ahorrarían 12 millones de euros.

«El control del gasto ha de ser más riguroso y los gastos tienen que estar justificados», manifestó Larraitz Ugarte. La Diputación considera que el acuerdo con la sociedad privada que gestiona actualmente esas tarea es «perjudicial para los intereses de los guipuzcoanos, por cuanto dicha empresa obtiene beneficios sin asumir para nada el principio de riesgo». Fue la portavoz de la Diputación, Larraitz Ugarte, quien confirmó ayer la noticia en rueda de prensa.

Según explicó, la subcontratación de Bidelan -constituida en abril de 2003 por la unión de Iridium (Grupo ACS, cuyo presidente es Florentino Pérez), Grupo Campezo y Transitia- se produjo en el momento de la creación de la misma, para un período de diez años, hasta 2013, con el objetivo de que se hiciera cargo del mantenimiento y explotación de la AP-8 y la AP-1. De acuerdo con el contrato firmado, Bidegi realizaría sus abonos a Bidelan conforme al tráfico, es decir, al número de vehículos que transitasen por el tramo guipuzcoano de esa vía.

Pero la cuestión empieza a cambiar a partir de 2009, cuando la tendencia del tráfico no se ajusta a las previsiones. Bidelan considera que no está ingresando lo suficiente y pide una modificación del contrato, petición que Bidegi aceptó, de manera que, además de los costes fijos, la empresa privada obtiene un beneficio del 7,7%. El contrato tuvo, asimismo, efecto retroactivo, desde enero de 2009. A raíz de la firma de este acuerdo, se entiende que Bidelan obtiene un beneficio asegurado, independientemente del tráfico. Por si fuera poco, el contrato fue prorrogado hasta 2018.

«El resultado de la modificación contractual es evidente: Bidelan obtiene siempre beneficios y desaparece el principio de riesgo; cuanto más gasta, más ingresa», precisó Ugarte.

La Diputación calcula que, como consecuencia de la modificación, durante el cuatrienio 2009-2012 se han abonado 15,5 millones de euros más a Bidelan (3,5 millones en 2009, 4,9 en 2010, 3,9 en 2011 y 3,2 en 2012).

Por todo ello, la institución foral ha decidido iniciar los trámites para rescindir y revocar el contrato con Bidelan, conflicto que será resuelto por los tribunales. «Resulta paradójico que, mientras la empresa privada disfruta de beneficios, la sociedad pública acumule deudas. La Diputación ha evidenciado dicha situación reiteradamente y ha adoptado varias iniciativas en este sentido, no de manera aislada, sino con diversos acuerdos para salir del atolladero al que nos ha conducido Bidegi», manifestó la también diputada de Infraestructuras Viarias. La sociedad pública acumula una deuda de 900 millones de euros con los bancos.

Ugarte aprovechó la ocasión para recordar que la Diputación está elaborando una propuesta de norma foral para la financiación de las carreteras, cuyos objetivos son hacer frente al déficit de mantenimiento y mejorar las calzadas del herrialde. Preguntada por el anteproyecto que afecta a los vehículos pesados, informó que, por ahora, no se ha recibido alegación alguna, aunque puntualizó que el plazo para ello se terminaba el pasado sábado y que aún están esperando las alegaciones que podrían llegar mediante correo.

Ante las críticas de algunas formaciones políticas por usar estas fechas de verano para realizar esta tramitación, replicó que la propuesta está en la mesa de todos los grupos de la oposición desde principios de julio, «por lo que han dispuesto de dos meses para presentar alegaciones».

El acuerdo, la primera opción

Respecto al trámite iniciado para la rescisión del comentado contrato, aseguró que la voluntad de la Diputación es «establecer un diálogo y llegar a un acuerdo con Bidelan para negociar su salida de Bidegi».

En cuanto al futuro laboral del personal -más de 200 personas, según indicó Ugarte-, explicó que se han mantenido contactos con los comités de empresa y que todos se encuentran al tanto de la situación. El propósito es que toda la plantilla de Bidelan pase a Bidegi.