El Gobierno francés pretende ampliar hasta los 43 años en 2035, desde los 41,5 actuales, el periodo de cotización mínima exigible para acceder a una pensión, según informó ayer la oficina del primer ministro, Jean-Marc Ayrault, a la conclusión de la segunda jornada de conversaciones con sindicatos y patronal. En concreto, el planteamiento del Gobierno contempla un incremento en el periodo de cotización exigible para cobrar una pensión de un trimestre cada tres años a partir de 2020, lo que elevaría el plazo necesario a 43 años en 2035. Asimismo, la propuesta contempla subir la aportación de empresas y trabajadores a partir de 2014. No obstante, la reforma planteada por el Ejecutivo descartaría completamente elevar la edad legal de jubilación más allá de los 62 años.