Antonio Sánchez Escudero y su afán por provocar sonrisas mediante sus libros de autoayuda
Desde que le diagnosticaron Parkinson, Sánchez Escudero no ha dejado de hacer cosas. Entre ellas se encuentra su faceta de escritor; ya tiene un libro que ayuda a afrontar las enfermedades y otro para dejar de fumar.
Nagore BELASTEGI | DONOSTIA
Con voz dulce, el madrileño Antonio Sanchez Escudero no duda en contarle a quien se le acerque su vida, para nada común, bastante dura. Sin embargo, no borra la sonrisa de su cara e irradia optimismo, unas sensaciones que ya ha plasmado en dos libros (amén de otros dos que vienen en camino).
Cuando le diagnosticaron Parkinson, este hombre de vida intensa no se aturdió y decidió plantarle cara superando los obstáculos que la enfermedad le ponía. «¿Encima de que tengo Parkinson voy a estar deprimido? Los neurólogos me dicen que soy un caso raro, que la gente se vuelve pesimista». Sin embargo, su positividad le impulsó a escribir el libro «Mi lucha contra el Parkinson», que, en realidad, sirve para llenar de fuerza a todo aquel que padezca cualquier enfermedad, o no.
Recientemente Sánchez Escudero ha presentado su último libro, «¿Quieres dejar el tabaco?», que en lugar de decirnos que no fumemos nos conmina a «¡Fuma más!». «Si tú le dices a alguien que deje de fumar, lo va a dejar cuando quiera. Eso tiene que salir de cada uno. Así que les digo que fumen más, a ver si así me llevan la contraria, que es lo que les gusta», explica este hombre irreductible, que estudia euskara, hace gimnasia, escribe, da conferencias... «Quien fuma se convierte en esclavo durante toda la vida y encima va a pagar al Estado 100.000 euros, que es lo que un fumador se gasta en toda su vida». También es crítico con el Gobierno en el aspecto de que el tabaco es legal «porque están recibiendo impuestos», a pesar de que a causa de ello mueren 3.000 personas al año. En cambio, «si un chaval pasa tres kilos de hachís, va a la cárcel, y el hachís mata a muy poca gente».
A este hombre tan activo le gustaría participar en clases informativas a niños para que aprendan que «el tabaco es una cosa de tontos».
Rendirse, lo último
En las páginas de los libros podemos encontrar alusiones a cosas que aprendió de los animales, como por ejemplo que todos ellos tienen algo en común, y es que ninguno fuma. Esta referencia le viene de cuando era niño ya que vivió en el monte de los 7 a los 12 años, en Riofrio (Segovia), durante la postguerra. Nació en plena guerra y ya de pequeño sintió de cerca la muerte. «Un obús cayó en nuestro tejado. Nos salvamos porque nos metimos debajo de la cama», cuenta. Más tarde, tuvo otra experiencia desagradable cuando, en su intesa vida de viajes por su trabajo vinculado a la importación-exportación, sobrevolando el Océano Índico no podían aterrizar, y a él le dio mucha rabia por la forma tan tonta en la que iba a morir. «Así que cuando me dijeron que tenía Parkinson pensé, `¿con todo lo que he pasado me queréis meter miedo?'».
Ahora, ya abuelo, trata de vivir la vida al máximo mimando sus neuronas para que Parkinson no le moleste demasiado. «Les llevo a los conciertos, al rompeolas, a ver puestas de sol, porque les encanta».
Dir.: Claude Miller.
País: Estado francés. 2012
Dur.: 110 minutos.
Dir.: Robert Schwentke.
País: EE.UU. 2013.
Dur.: 96 minutos.
Antonio Sánchez Escudero, además de escribir libros, está aprendiendo euskara, hace yoga y pilates, da conferencias en la universidad, está aprendiendo a tocar la txalaparta y protagonizó un videoclip del grupo PLV Havoc