La decisión de la Reserva Federal de no modificar su política expansiva catapultó a las bolsas de uno y otro lado del Atlántico. Por tanto, las especulaciones sobre el inicio inmediato en el recorte del programa de compra de deuda quedaron en nada. Además, Ben Bernanke resaltó de nuevo la fragilidad de la recuperación y los peligros de una retirada precipitada de los estímulos. En Wall Street se dispararon los índices hacia nuevos máximos históricos tras la noticia, aunque ayer la euforia se matizaba con recortes leves en el Dow Jones y el S&P 500. En este contexto favorable, el Ibex abría brecha sobre los 9.000 puntos y llegó incluso a las puertas de los 9.200 puntos a primera hora. Finalmente, tras ganar un 1,01%, se paró en los 9.153,70 puntos, nuevo máximo desde octubre de 2011. Las plazas europeas también acabaron con notables avances. Londres subía un 1,01%, y París, un 0,85%, en tanto que Fráncfort se anotaba un 0,67% para marcar nuevos máximos históricos. Por valores del Ibex, destacaron las ganancias de Popular (+6,20%), Bankinter (+3,84%) y Sabadell (+2,83%). El sector bancario está obteniendo crédito de los inversores por sus políticas de saneamiento. Los dos grandes, Santander (+1,16%) y BBVA (+0,76%), registraron subidas moderadas. Mientras tanto, Inditex (+2,03%) sigue haciendo historia al cerrar ayer en los 113,35 euros, después de acumular mejoras de recomendación. Mapfre y FCC, los peores, cayeron más de un 2%. En París, destacaron entre los alcistas Unibail (+4,75%), Michelin (+3,62%) y Renault (+3,58%), frente a Gemalto (-2,55%), el peor de la jornada.