Huelga mayoritaria en la enseñanza concertada por un convenio propio
La huelga convocada en los más de 250 centros de enseñanza privada concertada de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa en protesta por los recortes y en demanda de un convenio propio, «sin chantajes ni recortes», obtuvo un seguimiento de más del 80% de los trabajadores, según los datos de los sindicatos, que estimaron en cerca de 100.000 el número de alumnos afectados. La patronal rebajó la cifra de seguimiento al 48%.
GARA | DONOSTIA
La convocatoria del paro, que estaba dirigida a casi 12.000 trabajadores de los centros de la red privada concertada de la CAV -excepto las ikastolas, que tienen convenio propio-, fue secundada de forma «muy amplia», lo que se dejó notar en la práctica totalidad de los centros del sector, «salvo contadas excepciones», según la información difundida por ELA, sindicato mayoritario en este sector.
En las asambleas celebradas en las últimas semanas, muchos centros habían tomado la decisión de cerrar sus puertas, aunque los servicios mínimos decretados por el Gobierno de Gasteiz les obligaban a abrir, «a pesar de que no ha acudido ningún trabajador».
Los datos de ELA apuntan a que «en general», en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa más del 80% de los trabajadores secundaron el paro. La estimación de los sindicatos es que la protesta afectó a cerca de 100.000 alumnos que cursan estudios de Primaria y ESO en estos centros.
La huelga convocada por ELA, CCOO, STEE-EILAS, LAB y UGT tenía como objetivo denunciar los recortes que están aplicando las patronales de los centros de iniciativa social de la enseñanza concertada -Kristau Eskola y AICE- y exigir que se vuelva a aplicar el convenio de la CAV.
Manifestaciones
Además de la huelga, se celebraron manifestaciones en Gasteiz, Bilbo y Donostia bajo el lema «Gure lan baldintzak borrokatu, murrizketarik ez». En la capital alavesa, los actos se iniciaron con una concentración ante el Parlamento, que acogía el Pleno de política fiscal, mientras en Donostia se llevaron a cabo una caravana de coches y una marcha por las calles céntricas.
En la movilización de Bilbo, el responsable de Enseñanza de ELA, Xabier Irastorza, criticó tanto al Gobierno de Gasteiz como a las patronales, ya que el Ejecutivo del PNV ha aplicado su política de recortes a la enseñanza concertada y la patronal ha trasladado estos recortes a los trabajadores.
«Se trata del mayor ataque a la educación de los últimos 25 años», subrayó, para añadir que desde 2012 se están aplicando recortes de entre un 2,5 y un 5% a los salarios, y a la vez, también aumentan las cargas de trabajo y se han registrado despidos.
Resaltó que si la patronal no está de acuerdo con los recortes del Gobierno, que «confronte con el Ejecutivo y le pida cuentas, en vez de traspasar ese problema a los trabajadores».
También denunció a la patronal por «romper» la mesa de negociación y aplicar el convenio estatal del sector desde el 7 de julio, fecha en la que decayó el convenio de la CAV.
Desmentido de Kristau Eskola
Kristau Eskola negó este extremo y aseguró que los centros mantienen «íntegramente» las condiciones laborales sujetas al módulo de financiación del Gobierno de Gasteiz y no las establecidas en el convenio estatal, al que «se ha visto obligado a recurrir de forma transitoria». Denunció asimismo que se haya trasladado la conflictividad a los centros, «lugar de la defensa de los derechos del alumno y de sus familias».
Para las próximas semanas, las centrales han convocado paros parciales del 21 al 25 de octubre y del 25 al 9 de noviembre y no descartan que el conflicto «se prolongue en el tiempo».
Los centros de la asociación vizcaina Apnabi, que acogen a personas afectadas de autismo, vivieron también una jornada de huelga para reclamar un convenio propio, que fue seguida por más del 90% de la plantilla -compuesta por unos 200 trabajadores- «pese a los servicios mínimos abusivos», según el sindicato LAB.
Esta central explicó que la convocatoria se hizo después de que Apnabi notificase que «iba a imponer el convenio estatal, dejando al margen los acuerdos adoptados en las negociaciones de un nuevo convenio». GARA