Protagonista sin quererlo de la jugada del penalti
Lotiés: «Me parece triste que tenga premio engañar al árbitro»
El central francés, titular en todos los encuentros oficiales disputados, admitió que no está contento con su rendimiento personal, debido a que el equipo «ha encajado muchos goles». Reconoce que en sus anteriores clubes le tocaba marcar «de manera individual».
Natxo MATXIN
Sin quererlo, Jordan Lotiés fue protagonista destacado de la derrota frente al Levante, pues estuvo involucrado en la jugada que decidió el resultado final. El defensa francés ratificó ante los micrófonos que su lance con Rubén no fue merecedor de la pena máxima. «Estoy junto a él y en el momento en el que ve que va a recibir el balon, se tira al suelo. No entiendo por qué, pero no hay penalti», relató.
El central rojillo reconoció que «es la primera vez que me pasa algo así, estoy sorprendido, pues duelos como esos se dan 40 veces por partido». «Si el atacante sabe que puede engañar al árbitro y llevarse un premio por ello, es normal que trate de aprovecharse de esta situación, pero también me parece triste», expuso.
Un sentimiento de «injusticia» y «decepción» es lo que le quedó a Lotiés tras la decisión de José Antonio Teixeira Vitienes, sumado a las «muchísimas ocasiones que fallamos a lo largo del partido». Una circunstancia que no le impide admitir la autocrítica en el instante posterior a que Andrés Fernández detuviese el lanzamiento de Diop. «En ese momento ya me había dado la vuelta para salir y el rival llegó antes que cualquiera de nosotros. Es cierto que teníamos que haber reaccionado mucho más rápido», asintió.
Una autocensura que también abarca al rendimiento individual que el de Clermont-Ferrand está ofreciendo hasta ahora, pese a ser titular indiscutible, tanto para Mendilibar como para Gracia. «Siempre hay lugar para la mejora, personalmente no estoy satisfecho con mi rendimiento y lo digo viendo el número de goles que hemos encajado, algo que también trasciende al punto de vista colectivo», indicó.
Ello es consecuencia de que Lotiés todavía se está aclimatando a una competición nueva para él. «Es bastante diferente al campeonato de Francia, allí la defensa es más individual, aquí el entrenador nos quiere inculcar una defensa más en equipo, por eso tengo que trabajar para habituarme a esta nueva forma de desenvolverse en el campo», admitió sin reparos.
El espigado zaguero no ocultó la «decepción» del vestuario rojillo tras perder, «pues hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos para ganar, pero no tuvimos suerte y sí algunas decisiones en contra». En todo caso, ayer el tropiezo ya estaba olvidado «porque ya estamos pensando en ganar en Málaga».
Aunque los servicios médicos rojillos no han establecido un periodo de baja, lo cierto es que la rotura fibrilar que ayer se conoció padece Raoul Loé en su cuádriceps derecho le privará alrededor de un mes de volver a jugar.
No es cuestión de instalarse en el pesimismo, pero lo cierto es que Osasuna no lo tiene nada propicio a priori para contrarrestar en estas dos próximas jornadas la desilusión que ha supuesto perder contra el Levante, un encuentro en el que se habían puesto muchas esperanzas por materializar la reacción que se vislumbraba en el equipo tras Elche y Atlético.
Para empezar, este viernes los rojillos deberán rendir visita al Málaga que, de momento, solo ha perdido por la mínima en casa contra el Barcelona. Por contra, los de Bernd Schuster han saldado con mucha solvencia sus otros dos compromisos como anfitriones que han afrontado hasta ahora. Golearon al Rayo por 5-0 y vencieron 2-0 al Almería. Están instalados cómodamente en la zona media de la tabla, en un proceso de reconversión con jugadores jóvenes y talentosos.
Si puntuar en La Rosaleda será tarea harto complicada, la exigencia se eleva exponencialmente en el siguiente compromiso, que vendrá precedido de un jornada de descanso por compromisos para el Mundial de Brasil. El temible Barcelona, que cuenta sus encuentros por victorias batiendo todos los récords, visitará El Sadar, si bien el denominado virus FIFA podría pasarles factura a los culés y beneficiar, de rebote, a Osasuna, que acostumbra a crecerse ante la adversidad.
Para ese día -19- no está todavía muy claro que pueda estar recuperada su estrella, Lionel Messi, aquejado de problemas musculares y cuyo periodo de baja se ha establecido entre dos y tres semanas. N.M.
